El municipio de Zona Bananera atraviesa un clima de tensión e incertidumbre, ya que sus calles, antes llenas de vida y actividad, ahora permanecen vacías después de las seis de la tarde por panfletos amenazantes que circulan en redes sociales.
Ante esta amenza, los residentes han optado por resguardarse en sus hogares, mientras los comercios mantienen sus puertas cerradas.
Vecinos describen el panorama como el de un “pueblo fantasma”, donde solo las luces de los hogares iluminan la noche.
La percepción de desprotección se intensifica debido a la casi nula presencia de autoridades en las calles, aumentando la sensación de inseguridad entre los habitantes.
Las autoridades locales aún no han emitido un pronunciamiento oficial, mientras la población espera que la normalidad regrese y que las noches en Zona Bananera dejen de estar marcadas por el miedo.












