En medio de la compleja situación económica y social que atraviesa Santa Marta, el alcalde Carlos Pinedo emprenderá un viaje oficial a Israel entre el 10 y el 20 de noviembre, cuyo costo será cubierto con fondos del Distrito.
El mandatario viajará acompañado de una delegación oficial durante diez días, en una agenda que, según la Administración Distrital, busca fortalecer la cooperación internacional y gestionar proyectos de desarrollo. No obstante, la decisión ha generado un amplio rechazo entre ciudadanos y líderes políticos, quienes consideran inoportuno el gasto en un momento en que la ciudad enfrenta serios problemas de inseguridad, movilidad y deficiencias en los servicios públicos.
“Mientras los samarios padecen el desempleo y el desorden vial, el alcalde se marcha de paseo diplomático con dinero del pueblo”, cuestionó un vocero comunitario del centro histórico.
La controversia aumenta debido a que el viaje coincide con las protestas convocadas para el 12 de noviembre en rechazo a las fotomultas y otras medidas impopulares del gobierno local. Para varios sectores, la ausencia del alcalde durante esta coyuntura demuestra una desconexión con las verdaderas necesidades de la ciudadanía.
La comunidad espera que el costoso desplazamiento deje resultados concretos para Santa Marta y no se convierta en otro ejemplo de despilfarro institucional.
 
			 
		










