Una amplia operación policial realizada este martes en Río de Janeiro dejó al menos veinte personas muertas y más de cincuenta detenidas. El operativo fue dirigido contra el Comando Vermelho, una de las organizaciones criminales más poderosas del país.
El gobernador del estado, Claudio Castro, informó que entre las víctimas hay dos policías y calificó el operativo como “el mayor” ejecutado hasta ahora contra este grupo, que junto al Primer Comando de la Capital (PCC) lidera el narcotráfico en Brasil.
Castro explicó que el balance aún es preliminar, ya que la operación —que inició en la madrugada— continúa en marcha y no se descarta que aumente el número de muertos o capturados.
Los enfrentamientos se concentraron en los complejos de favelas de Penha y Alemão, donde los residentes reportaron intensos tiroteos durante varias horas. Según medios locales, miembros del Comando Vermelho levantaron barricadas para impedir el avance de los agentes, que desplegaron cerca de 2.500 efectivos en la zona.
El gobernador aseguró que los delincuentes incluso utilizaron drones armados para atacar a los uniformados, y mostró videos como evidencia. Hasta el momento, las autoridades han decomisado alrededor de 50 armas de fuego, entre ellas 31 fusiles de uso militar exclusivo.
La operación continúa como parte de la ofensiva del gobierno regional para debilitar las estructuras del crimen organizado en Río de Janeiro.
