Por Álvaro Cotes Córdoba
«Exactamente a las 5:20 a.m., fui víctima de un intento de violación por el señor Nael Polo. Me defendí como pude, grité fuerte y no lo dejé penetrarme, pero me lastimó en la cara, dejándome moretones en el rostro», relató la mujer en un desesperado llamado de auxilio compartido en redes sociales. Según su relato, el agresor huyó al escuchar el motor de una moto que pasaba por el lugar, dejando a la víctima sola y herida.
Inmediatamente, la mujer acudió al hospital local, donde le tomaron un dictamen médico que certifica las lesiones. De allí, se dirigió a la estación de policía de Concordia para formalizar la denuncia. Sin embargo, lo que encontró fue una pared de burocracia y desdén: el comandante de la estación se negó a recibirla, argumentando que «no era su función» y que el trámite correspondía al inspector de policía, quien supuestamente estaba «ocupado con las elecciones».
«Si no está el inspector, el deber de la policía es tomar la denuncia en primera instancia para que se haga pronto el procedimiento», clamó la abogada víctima, quien adjuntó fotos de sus moretones como prueba irrefutable. Pero la humillación no terminó allí. El comandante, según su denuncia, le insinuó que ella «sí le daba color a las cosas» –es decir, que exageraba– y que «solo quería tener la razón siempre», minimizando el trauma como si no fuera «nada».
El hecho ocurrió en Concordia, en el departamento de Magdalena, Colombia, en las primeras horas de este domingo, coincidiendo con las elecciones para elegir el candidato presidencial y los aspirantes al Congreso por parte del Pacto Histórico.
Se trata de Dayana Luz Castro Salvavatt, quien acostumbraba a salir muy temprano a trotar para recuperarse de una lesión ocasionada por un accidente laboral. Aseguró que el hombre. identificado como Nael Polo la atacó, cuando trotaba por el camino Moya.
El testimonio, difundido en cuenta de la plataforma Facebook, ha generado una ola de indignación. Usuarios locales exigen justicia inmediata, con comentarios como: «¿Cómo es posible que en día de elecciones, la policía priorice votos sobre la vida de una mujer?». Hasta el momento, no hay reportes oficiales de la Policía Nacional ni de la Fiscalía, pero la víctima apela directamente a las autoridades competentes: «Pido colaboración para que me ayuden. En la estación no quisieron hacer el procedimiento».
Este caso expone una falla sistémica en la protección a víctimas de violencia de género, especialmente en contextos electorales donde los recursos policiales parecen desviados. Organizaciones como la Ruta Nacional contra la Violencia hacia las Mujeres han sido alertadas y podrían intervenir. ¿Cuántas más tendrán que alzar la voz antes de que el Estado responda? La comunidad de Concordia exige: ¡Capturen a Nael Polo y garanticen que la denuncia se tramite HOY! Si tienes información, contacta a la línea 123 de emergencias o la Fiscalía General. La justicia no puede esperar.
