El joven de noveno grado del Instituto La Salle, logró un cupo en la Selección Colombia de Astronomía tras superar exigentes entrenamientos.
Redacción Sociales
LA LIBERTAD
A sus 14 años, Daniel De Ángel Villar ha demostrado que la curiosidad puede ser el motor de grandes sueños. Este estudiante del Instituto La Salle de Barranquilla representará a Colombia en la 4ª edición de la Olimpiada Internacional de Astronomía y Astrofísica Junior (IOAAjr), que se celebrará del 18 al 25 de octubre de 2025 en Piatra-Neamț, Rumania, encuentro que reunirá a los jóvenes más talentosos del mundo en el campo de la ciencia y la observación del cosmos.
Su participación no fue al azar, sino el resultado de un proceso de esfuerzo constante, disciplina y una pasión genuina por comprender los misterios del universo.
Daniel forma parte de la Selección Colombia de Astronomía, integrada por estudiantes destacados de diferentes regiones del país. El equipo será liderado por Tonny Gualdrón Pacheco, con el acompañamiento del profesor Jorge Castro Mejía, también del Instituto La Salle, junto con la estudiante Valentina Baldovino, del colegio Alexander Von Humboldt.
El recorrido de Daniel comenzó un año atrás, cuando decidió participar en las pruebas nacionales de selección. Durante ese proceso se enfrentó a más de cuatro pruebas escritas y entrenamientos intensivos en la Universidad Antonio Nariño (UAN), en Bogotá.
Allí fortaleció sus conocimientos en astrofísica, resolución de problemas científicos y observación celeste, acompañado de los docentes Cristian Góez y Tonny Gualdrón, quienes guiaron con dedicación su preparación.
“Ha sido un camino de mucho esfuerzo y aprendizaje. Desde el año pasado me he preparado con el apoyo de mi colegio y mis profesores, enfrentando pruebas exigentes que me ayudaron a crecer académicamente y a fortalecer mi amor por la astronomía”, comentó Daniel, recordando las largas jornadas de estudio en su proceso.
Tal y cono él mismo lo expresa, detrás de este logro hay sacrificio y compromiso, pues durante meses, los días de descanso se convirtieron en sesiones de práctica, simulacros y talleres.
“Toda la preparación fue bastante desafiante, un entrenamiento de mente y trabajo arduo. En las vacaciones no descansamos y solo estábamos en entrenamiento; en el tiempo libre, estábamos también en entrenamiento, todo fue de mucho compromiso, y creo que en ese esfuerzo estuvo el reto”, expresó el joven.
Sobre el estudiante
Daniel nació en Nueva Granada, Magdalena, y actualmente cursa noveno grado en el Instituto La Salle. Su interés por la astronomía surgió de una manera natural, casi que espontánea; no hubo un evento específico que lo impulsara, sino una fascinación por lo desconocido.
“Desde hace mucho tiempo sentí interés por el hecho de que los seres humanos pudiéramos entender lo que ocurre a millones de kilómetros de la Tierra. Todo eso siempre me interesó, saber cómo funciona el espacio, cómo funciona aquello que no vemos”, explicó.
Esa curiosidad, unida a su talento y disciplina, lo llevó a convertirse en un joven prometedor de la ciencia. Para él, la astronomía no es solo un campo de estudio, sino una forma de mirar la vida con preguntas infinitas y el deseo permanente de aprender.
Así se vivirán las olimpiadas
La Olimpiada Internacional de Astronomía y Astrofísica Junior es considerada una de las competencias científicas más exigentes del mundo para estudiantes de secundaria. En Rumania, Daniel deberá enfrentarse a diversas pruebas, entre ellas una evaluación teórica, donde los participantes deberán explicar fenómenos astronómicos complejos a partir de datos y contextos; una prueba observacional, en la que se medirán sus habilidades con telescopios para identificar constelaciones, estrellas y objetos celestes; y finalmente, una prueba grupal, diseñada para fomentar el trabajo en equipo y la resolución colaborativa de problemas.
Aunque los retos son grandes, Daniel se siente preparado y muy orgulloso de tener esta gran oportunidad. “Saber que iba a participar fue una mezcla de muchos sentimientos, sentí orgullo, felicidad, nervios. Es una nueva experiencia que nunca había vivido, pero sobre todo, me sentí feliz conmigo mismo, porque pasé de entre cientos de estudiantes a una competencia internacional”, expresó con emoción.
Nada de esto habría sido posible sin el acompañamiento de su familia y de su institución educativa. El Instituto La Salle de Barranquilla, a través de su semillero Amigos Lasallistas de la Astronomía (Alas), ha consolidado una tradición de formación científica que impulsa a jóvenes a explorar la física, la tecnología y el universo.
Gracias a ese compromiso, más de cinco estudiantes lasallistas han representado al colegio y al país en olimpiadas internacionales en los últimos años.
El sueño de Daniel es continuar su camino en la ciencia, estudiar algo que se relacione con física y seguir vinculado a la astronomía. “Me gustaría que al graduarme pueda aplicar todo esto que he aprendido, hacer algo que se relacione con la astronomía, porque simplemente me ha dejado mucho”, afirmó.
Finalmente, el joven aprovechó para enviar un mensaje a aquellas personas que sueñan con alcanzar metas similares, motivándolos a que no duden en iniciar algo nuevo, “que no se pregunten por qué lo intentan. Todo esfuerzo tiene su recompensa, y si uno se lo propone, todo es posible”.