Estudiantes protagonizaron una jornada de manifestaciones y actos vandálicos en rechazo a la posible designación de Leyton Barrios como rector. *Denuncian irregularidades en el proceso de elección y exigen transparencia y respeto por la autonomía universitaria.
En la tarde de ayer, la Universidad del Atlántico fue escenario de fuertes protestas y actos vandálicos protagonizados por estudiantes que expresaron su inconformidad frente al proceso de elección del nuevo rector. Los manifestantes rechazaron la candidatura de Leyton Barrios, argumentando que no cumple con los requisitos establecidos para asumir el cargo.
Los estudiantes aseguraron que el Consejo Superior Universitario no ha sido transparente con la presentación de las hojas de vida de los aspirantes y exigieron que la Universidad Americana entregue los documentos que certifiquen los pagos de ARL, pensión y salud que acrediten a Barrios como docente en esa institución.
Asimismo, señalaron a varios consejeros de mostrar afinidad con el candidato, entre ellos a Miguel Caro, actual representante de las directivas académicas, cuya oficina fue tomada y vandalizada con grafitis donde lo tildaron de “corrupto”. También mencionaron a Angelly Díaz Cordero, representante estudiantil, y a Abraham Scoll, representante de egresados, quienes según los manifestantes respaldan abiertamente a Barrios.
Otro punto de inconformidad fue la gestión de Josefa Cassiani, rectora encargada, a quien los estudiantes critican por haber solicitado la renuncia protocolaria de varios vicerrectores, entre ellos Maryluz Stevenson (Vicerrectora Administrativa y Financiera), Alejandro Urieles (Vicerrector de Docencia), Álvaro González (Vicerrector de Bienestar Universitario y también candidato a la rectoría) y Miguel Caro (Vicerrector de Investigación, Extensión y Proyección Social).
Los estudiantes afirmaron que Caro se autoproclamó como presidente del Consejo Superior, acción que, según ellos, viola los estatutos universitarios. Por esta razón, interpusieron una denuncia ante las autoridades competentes.
La representante estudiantil ante Bienestar Universitario, Rosa Castillo, expresó que las manifestaciones no deben calificarse como vandalismo, sino como “la voz de una comunidad universitaria que no ha sido escuchada”. Añadió que exigen respeto por la autonomía universitaria y transparencia en los procesos de elección:
“Hay serias irregularidades que no pueden ser ignoradas, incluyendo la posible inhabilidad del candidato que pretenden imponer. No promovemos la violencia, promovemos la resistencia”, señaló.
Por su parte, la Universidad del Atlántico emitió un comunicado informando que su equipo de vigilancia, junto con el Departamento de Infraestructura Física y Servicios Generales, activó los protocolos de seguridad para proteger a las personas y los bienes institucionales. La administración hizo un llamado a la calma y reiteró su compromiso con la transparencia, la participación y el respeto como pilares de la democracia universitaria.
En medio de la tensión, los candidatos a la rectoría también se pronunciaron. Danilo Hernández manifestó a través de su cuenta en la red social X que “no se justifica poner en riesgo la integridad de la comunidad y los bienes de la universidad. La estabilidad lograda en estos cuatro años fue fruto del diálogo y la construcción conjunta”. Hizo un llamado a resolver las diferencias desde la protesta pacífica.
A su vez, el candidato Wilson Quimbayo rechazó los actos violentos y pidió que las diferencias sean tramitadas dentro de los canales democráticos:
“El campus universitario debe ser un centro de debate de ideas. La institucionalidad debe prevalecer siempre; las personas pasan, pero las instituciones permanecen”, afirmó.
El Gobernador del Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa, en su calidad de presidente del Consejo Superior, condenó los hechos de violencia y los calificó como un atentado contra la paz y la convivencia universitaria.
Se espera que en los próximos días la Procuraduría General de la Nación se pronuncie sobre las recusaciones presentadas durante la sesión del Consejo Superior del pasado 10 de octubre. Según fuentes oficiales, la respuesta podría tardar entre 15 y 20 días.
La crisis en la Universidad del Atlántico refleja una profunda fractura institucional que va más allá de la elección de un rector. La falta de consenso, los cuestionamientos a la transparencia y la desconfianza entre los diferentes estamentos universitarios amenazan con prolongar la inestabilidad en la principal alma máter del departamento. Mientras la comunidad espera respuestas claras de los entes de control, la universidad enfrenta el reto de recuperar el diálogo, la confianza y la paz que permitan retomar el rumbo académico y administrativo que hoy se encuentra en entredicho.
Álvaro González rechaza hechos de violencia en la Universidad del Atlántic
El candidato a la rectoría de la Universidad del Atlántico, Álvaro González expresó su rechazo ante los actos de violencia registrados en el campus, específicamente en las plazoletas de los bloques D y ABC, y en la oficina de la Vicerrectoría de Investigación.
Quimbayo calificó los hechos como una amenaza a la seguridad y a los valores de respeto y convivencia que deben prevalecer en la universidad pública. Hizo un llamado a la comunidad universitaria a rechazar toda forma de agresión y a fortalecer el diálogo como vía para resolver las diferencias.
“Mi compromiso es con una Universidad del Atlántico segura, plural y humanista, donde el respeto y la concertación sean el camino para avanzar”, afirmó el candidato.