En un encuentro multitudinario con las comunidades indígenas, campesinas, organizaciones sociales y jóvenes del Magdalena, el candidato presidencial Iván Cepeda y la candidata al Senado Patricia Caicedo anunciaron una alianza programática que busca unir dos grandes propósitos: la Revolución Agraria que impulsa el Pacto Histórico y el Plan Especial de Recuperación de la Sierra Nevada de Santa Marta.
El candidato presidencial Iván Cepeda explicó que la llamada Revolución Agraria, que viene planteando, no es solo una política de redistribución de tierras, sino una estrategia integral de desarrollo económico, social y ambiental.
“Desde el inicio, nuestro primer gobierno progresista ha sostenido que Colombia puede convertirse en una potencia mundial de la vida. No es una consigna vacía: es reconocer que nuestra biodiversidad, nuestra riqueza natural y cultural pueden convertir al país en una despensa agroalimentaria para su propio pueblo y para el mundo”, afirmó el candidato.
Cepeda subrayó que este proyecto implica multiplicar la capacidad productiva de la economía campesina, fortalecer los mercados populares urbanos y garantizar la seguridad alimentaria. “Así lograremos abaratar los alimentos, erradicar el hambre y dignificar al campesinado colombiano”, aseguró.
Por su parte, la candidata al Senado Patricia Caicedo coincidió plenamente con el planteamiento del líder presidencial y anunció que su compromiso legislativo será hacer realidad esa Revolución Agraria desde el corazón del Caribe colombiano.
“La Sierra Nevada de Santa Marta será el símbolo de esa transformación. Es un territorio ancestral, sagrado e indivisible, y debe ser administrado por sus verdaderos guardianes: los pueblos indígenas”, afirmó Caicedo.
Patricia Caicedo explicó que el plan incluye la creación de una Entidad Territorial Indígena (ETI), con autonomía para administrar los recursos naturales y garantizar el saneamiento, ampliación y protección de los resguardos.
“Tenemos un acuerdo —dijo Caicedo—: la Sierra será reconocida como un territorio ancestral, sagrado e indivisible. Gestionaremos ante la Agencia Nacional de Tierras un fondo especial para la compra, ampliación y recuperación de tierras en favor de los pueblos indígenas que históricamente las han habitado”.
El proyecto también contempla la recuperación ambiental de las cuencas y ecosistemas degradados por la deforestación y la expansión agroindustrial, además de un programa de saneamiento básico y salud pública para las comunidades campesinas y mujeres rurales, quienes hoy padecen las consecuencias de la falta de atención y servicios esenciales.
Un pacto entre la montaña y el mar.
Cepeda y Caicedo coincidieron en que esta Revolución Agraria también requiere sembrar sobre otros terrenos: los de la infraestructura, la organización social y la participación comunitaria.
“El Plan Nacional de Construcción de Vías Terciarias será fundamental para conectar territorios, dinamizar economías locales y cerrar brechas históricas entre el campo y la ciudad”, explicó Cepeda, quien resaltó la necesidad de que las comunidades sean protagonistas reales del cambio, participando activamente en la ejecución de obras y en la toma de decisiones.
Este plan debe contar con la participación de las comunidades, de sus organizaciones sociales y de las juntas de acción comunal, tanto en la ejecución de las obras viales como en la construcción de la infraestructura complementaria en zonas rurales y urbanas.
Patricia Caicedo añadió que el Magdalena y el Caribe necesitan una política pública diferencial que reconozca su papel en la seguridad alimentaria y la sostenibilidad del país. “Aquí empieza el camino hacia una Colombia más justa, donde la tierra y la dignidad se conviertan en el centro del proyecto nacional”, sostuvo.
La alianza programática entre Iván Cepeda, Patricia Caicedo y Yamilex Charris representa una convergencia de luchas: la defensa de la naturaleza, la soberanía alimentaria, los derechos de los pueblos indígenas y el fortalecimiento del campo como motor de paz y justicia social.
Durante el encuentro, Iván Cepeda y Patricia Caicedo hicieron un llamado enfático a respaldar el liderazgo joven, fresco y transformador de Yamilex Charris, candidata a la Cámara por el Magdalena. Ambos coincidieron en que su voz representa la renovación política que necesita el departamento y el país. “Yamilex simboliza la fuerza de una nueva generación comprometida con la justicia social, la equidad de género y la defensa del territorio”, afirmó Caicedo.
Con ese mensaje, los dos líderes invitaron a las comunidades del Magdalena a votar con conciencia, con convicción y con esperanza, para consolidar una bancada del cambio que una la Sierra, el campo y las ciudades en un solo propósito nacional de transformación.