Cancelación de la concesión portuaria ‘Las Américas’

Por: César Serpa

Ojalá que la cancelación de la concesión portuaria “Las Américas” en mi ciudad Santa Marta también sea motivo para que la Anla, el Ministerio de Transporte y la Superintendencia de Transporte hagan la revisión de la eterna concesión que hoy tiene la Sociedad Portuaria Regional de Santa Marta, la cual ha manejado el Puerto de Santa Marta desde su privatización en 1.993 hasta el 2028 (el próximo gobierno definirá su renovación) y que durante más de 30 años casi el 80% de sus dividendos se han quedado en unas cuantas familias poderosas de Santa Marta (los Dávila en su mayoría), mientras el impacto económico para los Samarios no es tan significativo como debería ser (solo el 23% de los dividendos son para la ciudad), teniendo en cuenta las dimensiones y la importancia estratégica de dicho puerto.

Lo más grave y delicado de la actual concesión del Puerto de Santa Marta es que no ha podido ser eficaz en el control del decomiso cada vez más frecuente de alijos ó cargamentos con COCAÍNA, sobretodo en contenedores de Banano de exportación (casualmente la mayoría de familias poderosas de Santa Marta y del Magdalena tienen enormes fincas de Banano); es increíble que desde hace décadas adentro de las instalaciones portuarias oficiales de la ciudad se presenten actividades de Narcotráfico con tanta frecuencia y que aún siga pasando sin que eso sea una causal para la suspensión ó cancelación de la concesión portuaria.

En conclusión el gobierno nacional debería revisar la actual concesión portuaria de Santa Marta para dejarle al próximo gobierno unos argumentos sólidos para definir la viabilidad de la próxima renovación en 2028, ya que lo ideal sería que después de más de 30 años se busquen unos socios estratégicos con mayor peso logístico internacional (empresas de China, Singapur, Malasia, España, etc), que sí sean capaces de poner al Puerto de Santa Marta en el mapa portuario mundial, para que deje de almacenar y exportar carbón en medio de una ciudad turística (qué incoherencia) y por fin pueda explotar todo el potencial de su increíble calado NATURAL (60 pies ó 18 mts de profundidad sin necesidad de costos de dragado), además de materializar por fin el viejo plan de expansión portuaria, el cual incluye una moderna renovación urbana para el conocido barrio “Pescaíto” (en donde nació el @PibeValderramaP), que permitiría que dicho sector pueda salir por fin del subdesarrollo en el que está; finalmente con una concesión portuaria moderna y de peso, también se podría desarrollar el concepto de “ciudad-puerto” (como existe en Valencia España, en Miami y en otros puertos mundiales), el cual consiste en integrar el puerto a la ciudad con equipamientos urbanos como: muelles para cruceros, centros comerciales, parques, etc.

Así como Colombia necesita sacudirse de esa élite feudalista, vividora y estafadora que nos ha mantenido en el subdesarrollo, mi ciudad Santa Marta también tiene que sacudirse de esa élite mezquina local que todavía sigue moviendo los hilos del poder y que ha mantenido a esta hermosa ciudad hundida en el subdesarrollo, ya que a ese tipo de élites egoístas les conviene el caos, el atraso y la ignorancia de la gente, porque ellos saben que el progreso y el desarrollo traen COMPETENCIA ante la cual no podrían competir jamás y así perderían su poder, sus fortunas y sus privilegios.