Santa Marta vivió la noche de este miércoles una escena digna de una película de acción. Un grupo de al menos diez delincuentes, disfrazados como empleados de la empresa Brinks, intentó ejecutar uno de los que pudo ser el robo más grande de la historia reciente en la ciudad.
El plan, que habría sido cuidadosamente preparado, fue frustrado gracias a la rápida reacción de un vigilante, quien dio la alerta a la Policía Metropolitana.
El operativo
El hecho ocurrió hacia las 8:00 p. m., en pleno Camellón de la Bahía, frente a turistas y samarios que quedaron atónitos al ver cómo decenas de uniformados rodeaban el búnker. Los delincuentes llegaron con un carro de valores similar al original, portando uniformes y armas, lo que les permitió ingresar al lugar.
Sin embargo, la intervención policial fue inmediata. Sin disparar un solo tiro, los agentes lograron reducir a varios de los asaltantes dentro del búnker, mientras que otros huyeron, pero fueron alcanzados y capturados en el barrio El Jardín, donde abandonaron el vehículo en el que escapaban.

El cabecilla
Entre los capturados figura alias “El Cabe”, señalado como cabecilla de la banda y reconocido integrante del Clan del Golfo en Bolívar. De acuerdo con el teniente coronel Julio Alexander Beltrán, comandante (e) de la Policía Metropolitana de Santa Marta, este hombre no solo tenía experiencia en grandes hurtos, sino también presuntos contactos dentro de la empresa.
“Era el que movía las fichas. Su papel era clave en la ejecución del robo”, indicó el oficial.
Antecedentes de los capturados
Las autoridades confirmaron que varios de los detenidos cuentan con antecedentes por homicidio y estarían vinculados a casos de sicariato en Barranquilla y Cartagena. Su rol en el operativo era brindar protección armada al líder, cubrir la fuga e intimidar al personal de seguridad.

Balance final
El operativo terminó con la captura de los diez implicados, quienes quedaron a disposición de la Fiscalía para su judicialización. La Policía destacó la labor de los vigilantes del búnker, cuya alerta temprana fue decisiva para evitar un golpe delictivo de gran magnitud en la capital del Magdalena.










