Cartagena dio un paso histórico en materia de urbanismo con la puesta en marcha de la primera Curaduría Pública del Caribe, iniciativa que permitirá avanzar en la legalización y reconocimiento de viviendas en barrios recientemente formalizados.
El proceso arrancó en el sector de Arroz Barato, donde más de 800 familias comenzaron a recibir acompañamiento técnico y jurídico para validar sus viviendas. Gracias a este trámite, los hogares podrán acceder a subsidios de mejoramiento, servicios públicos legales y estudios de seguridad estructural que garanticen la estabilidad de sus inmuebles.
De acuerdo con la Dirección de Control Urbano, encargada de liderar las visitas, los levantamientos arquitectónicos se realizarán de forma gratuita y se extenderán durante aproximadamente dos meses. “Este trabajo se hará casa por casa, asegurando que cada familia tenga la atención necesaria en su proceso de reconocimiento”, explicó Emilio Molina, director de la dependencia.
Con este avance, Cartagena se posiciona como ciudad pionera en la región al implementar un modelo que cumple con los compromisos del Plan de Desarrollo Distrital, contribuyendo a un territorio más organizado, equitativo y con mayores oportunidades para sus habitantes.