El 80 % de la capacidad cognitiva se desarrolla en los primeros 5 años, ¿cómo estimular las habilidades en los niños del Magdalena?

En Santa Marta se está implementando Little Skills, un programa pionero que aprovecha la máxima plasticidad cerebral que se da entre los 0 y 5 años, etapa decisiva que, según el Instituto Europeo de Educación, define gran parte del aprendizaje y el desarrollo futuro de los niños.

La primera infancia define gran parte del desarrollo intelectual y emocional de las personas, debido a que en los primeros 1000 días de vida, el cerebro infantil llega a formar alrededor de 1000 conexiones neuronales por segundo, según el Banco Interamericano de Desarrollo. Esto genera una ventana de aprendizaje que en el departamento del Magdalena ya se está aprovechando para potenciar el desarrollo de habilidades cognitivas, emocionales, motoras y sociales desde los primeros meses de vida.

Una de las metodologías que se está imponiendo en la región es la estimulación adecuada que, a través de programas como Little Skills (pequeñas habilidades), compone el primer paso de un nuevo modelo educativo que promueve el aprendizaje activo y significativo de los niños y bebés de 0 a 3 años, basado en el juego, el movimiento y la exploración. Esta propuesta pedagógica reconocida e impulsada internacionalmente por Cognita Redcol, se enfoca en estimular el desarrollo cognitivo, emocional, motor y social de los bebés preparándolos con confianza y autonomía para el ingreso al preescolar.

El programa Little Skills, que se está implementando en el Colegio Bureche School de Santa Marta, se desarrolla por sesiones en donde los bebés participan en actividades que estimulan la creación de conexiones neuronales, fortalecen el vínculo con sus padres y cuidadores, favorecen el desarrollo del lenguaje mediante sonidos y canciones, e impulsan la motricidad con ejercicios adaptados a su etapa. Además, estos espacios buscan integrar los sentidos de los menores, invitándolos a descubrir colores, texturas y sabores que despiertan su curiosidad natural.

Este modelo de acompañamiento temprano ha demostrado un impacto en el desarrollo infantil, permitiendo que los niños y bebés samarios lleguen al preescolar con entusiasmo, confianza y autonomía. Según Patrick Bauch, rector del colegio, el programa logra una transición fluida hacia metodologías activas de aprendizaje que priorizan la exploración y la construcción de conocimiento a partir de la experiencia.

“Al iniciar su formación desde Little Skills y continuar toda la trayectoria escolar en el mismo entorno, los niños logran una adaptación más amigable, una mayor estabilidad emocional y un sentido de pertenencia duradero. Esto, además, permite a los docentes y familias un seguimiento cercano y personalizado, lo que fortalece la continuidad académica y emocional a lo largo de los años”, explica el directivo de Bureche School.

Para dar continuidad al modelo, la propuesta educativa en el preescolar se articula con metodologías activas y proyectos de aula que ponen a los niños en el centro de su aprendizaje. En esta etapa, los intereses de los estudiantes se convierten en oportunidades para investigar, experimentar y crear, lo cual permite la integración del lenguaje, la motricidad, el pensamiento lógico y las habilidades socioemocionales en experiencias.

“El 80 % de la capacidad cognitiva se desarrolla en los primeros 5 años, por eso promovemos un modelo educativo que acompaña al niño desde sus primeros pasos, respetando su ritmo y fomentando la autonomía y la exploración. Programas como Little Skills demuestran el impacto de la estimulación adecuada en el rendimiento académico, la seguridad, la confianza y estabilidad emocional de los niños, reafirmando nuestro compromiso con una formación académica de alta calidad en la región.”, concluye el rector del Bureche School.