Calentamiento global, una realidad

Orlando Andrade Gallardo

El calentamiento global no es un saludo a la bandera, no es un discurso soso y banal, menos una discusión entre bobos, es una realidad que padecemos durante las 24 horas del día con altas temperaturas y humedad.

En el pasado reciente el fenómeno no tenía tanta trascendencia y pasaba desapercibido en la comunidad, hoy el común de la gente se queja por los calores insoportables en cualquier mes del año, en países como España ha causado cientos de muertes por los calores. El fenómeno no es nuevo para los científicos y físicos e investigadores, desde décadas han anunciado que el calentamiento global es una realidad que puede acabar con la existencia humana y su entorno. Las reuniones al más alto nivel de las Naciones Unidas no se pronuncian sobre las verdaderas causas del calentamiento del aire, porque atenta contra los intereses de  países poderosos e industrializados, como Estados Unidos, China y Europa. El tiempo  se agota y el problema se agrava cada año por el desorden ambiental, el afán de poder y riqueza para continuar  ejerciendo  control en los países y mercados que someten desde siglos.

Las reuniones que se realizan periódicamente para tratar el tema finalizan con los mismos resultados, detener  la tala de bosques, controlar el consumo exagerado de los combustibles fósiles, aguantar el consumismo  exagerado y la vanidad de la elite que no saben en qué gastar sus riquezas; en fin, docenas de recomendaciones que no se cumplen porque afecta a los poderosos. ¿Qué conviene más, desarrollismo anárquico o salud y vida?. Con seguridad que el grueso de la población responderá la segunda alternativa. Es cierto que el parque automotor quema abundante combustible fósil, pero con los vehículos eléctricos es posible que se minimice un poco la contaminación. El sector industrial que crece aceleradamente por el afán de riqueza y producir más bienes y servicios para satisfacer el consumismo, es donde no ceden los grandes capitales y tratan de ocultar el daño con programas sociales, pero no es suficiente por la magnitud del desastre ambiental que arrastra desde décadas.

La propuesta de la transición energética liderada por el presidente Petro avanza lentamente en algunas regiones del país, pero es una buena  opción para disminuir el uso del petróleo.  Los diferentes sectores de la industria y comercio que se agrupan en Andi y Fenalco, anualmente realizan encuentros sobre sus actividades económicas para medir el grado de desarrollo de sus empresas y es poco o nada lo que hablan sobre el problema del calentamiento global. Diferente a las presentaciones del presidente Petro, tanto en Colombia como los foros internacionales y centros académicos, sus énfasis sobre el problema del calentamiento global marca la diferencia, exigiendo que la explotación de los recursos naturales debe detenerse para asegurar la vida del planeta  y aun no tiene respuesta. Es la razón de ser señalado enemigo del capitalismo y los ricos, asegurar que los sectores con mayores riquezas deben pagar más impuestos para ayudar a los pobres y necesitados, lo mantiene como enemigo de la democracia y acusado de implantar un sistema comunista. Tener el valor de enfrentarse a los poderosos dueños de fortunas incalculables, es la causa que pesan para tratar de derrocarlo, mencionar nombres de los intocables de robarse los dineros de  la Nueva EPS en su alocución del pasado viernes, es motivo para declararlo enemigo y la razón de hundir cualquier propuestas que presente al Congreso de la República.

Aun año de finalizado el COP16, que movilizó a decenas de países, organizaciones no gubernamentales y las comunidades interesadas en la conservación del medio ambiente, donde se discutieron  programas puntuales sobre calentamiento global, los colombianos desconocen sus resultados. En el evento se gastaron más de 25 mil millones de pesos y Cali se vistió de gala para recibir los visitantes de diferentes naciones y culturas que se recrearon por la belleza de la ciudad y atención de sus gentes. Transcurrido doce meses  y  ningún  medio de comunicación ha mencionado nada sobre las conclusiones, y sus organizadores aseguraron que los trabajos serían divulgados y sostenible en la planificación de política pública con proyectos de corto y largo plazo. Los objetivos trazados no se ven en ninguna región del país. ¿Será otro evento más sin respuesta? El calentamiento global no espera.