La coalición de partidos y movimientos de izquierda que en 2022 llevó a Gustavo Petro a la Presidencia atraviesa un momento de incertidumbre política a pocas semanas de su consulta interna.
El futuro del Pacto Histórico como partido político dependerá de las decisiones que adopte el Consejo Nacional Electoral (CNE), órgano que deberá definir si la alianza obtiene personería jurídica.
El argumento es que no habría cumplido los requisitos estatutarios para fusionarse. La sala plena del CNE discutirá este documento el próximo 19 de septiembre.
De prosperar esa propuesta, congresistas cercanas al presidente como Gloria Flórez, Isabel Zuleta, Catalina Pérez, María del Mar Pizarro y María Fernanda Carrascal quedarían sin espacio dentro de la colectividad, lo que impactaría directamente en sus aspiraciones para 2026. El objetivo del Pacto era conformar listas conjuntas y alcanzar la mayoría en el Congreso, una meta que podría complicarse si se excluye a la Colombia Humana.
A este panorama se suma otra decisión del CNE: el reconocimiento de la escisión del Mais y la entrega de personería al movimiento Progresistas, liderado por María José Pizarro, David Racero y Heráclito Landinez. Sin embargo, la sentencia quedó condicionada a que Mais no tenga sanciones disciplinarias vigentes, lo que limita por ahora las aspiraciones de sus dirigentes.
La senadora Aida Avella, de la Unión Patriótica, una de las fuerzas que integran la coalición, ha sido enfática en exigir celeridad. Para ella, “el Consejo Nacional Electoral no puede seguir dilatando la entrega de la personería jurídica al Pacto Histórico”. La legisladora insistió en que la colectividad requiere claridad para organizar la consulta prevista el próximo 25 de octubre.