El mayor general Hernando Garzón Rey negó cualquier relación con el narcotráfico y aseguró que la foto que motivó su retiro fue sacada de contexto. Afirma que se trató de un episodio de extorsión sufrido por su familia en Villavicencio en 2023
El mayor general Hernando Garzón Rey, recientemente separado del cargo de inspector general de las Fuerzas Militares por orden del presidente Gustavo Petro, negó rotundamente los señalamientos que lo relacionan con el narcotráfico y denunció que su salida se produjo sin que se le permitiera ejercer su derecho a la defensa.
En una entrevista radial, el oficial relató que conoció la decisión a través de redes sociales. “Yo me entero por un Twitter que me lo reenvía un amigo, y cuando yo vi eso no lo podía creer. Fue una consternación total. Nadie me escuchó, ni se abrió una investigación formal. Lo correcto era una investigación seria antes de tomar una decisión tan grave”, declaró.
La foto que desató la controversia
Garzón explicó que la imagen que habría motivado la decisión presidencial corresponde a un viaje realizado en abril de 2023 a Villavicencio, cuando visitaba a su familia. Según dijo, durante un recorrido con tropas y personal de seguridad se toparon con hombres armados, presuntamente integrantes de las disidencias de las Farc, quienes intentaron extorsionarlos.
“Nos pidieron dinero, pero yo me negué. Esa foto la tomó un soldado de inteligencia, no fue una foto con los bandidos. Aparezco de espaldas. Después de eso las disidencias extorsionaron a mi familia y se llevaron ganado”, aseguró.
El general agregó que la fotografía fue usada de manera descontextualizada. “La imagen no muestra vínculos con delincuentes, sino un episodio de extorsión. Reporté todo a mis superiores y a la Fiscalía”, sostuvo.
Respuesta a Petro y petición de garantías
Frente a las declaraciones del presidente, quien afirmó que existían indicios de vínculos con cultivos ilícitos, Garzón lo desmintió: “Eso no se compadece con la verdad. No tengo nexos con narcotraficantes ni con coca. Mi finca es ganadera. Si hubiera cultivos ilícitos, el Estado tendría que aplicar extinción de dominio”.
Además, pidió garantías de seguridad para él y su familia, al advertir que tras el episodio de 2023 comenzaron las amenazas.
Patrimonio bajo escrutinio
En medio de la polémica, el oficial defendió la legalidad de sus bienes. “Soy ganadero desde los 18 años, cuando asesinaron a mi padre y a mis hermanos. Una finca en el Guaviare puede costar 500 o 600 millones de pesos, lo mismo que un apartamento en Bogotá. Todo está declarado y reportado año tras año. Mi patrimonio es legal y transparente”, enfatizó.
Finalmente, Garzón manifestó su disposición a dialogar directamente con el presidente Petro. “Decirle a Petro mirándole los ojos, con hechos y pruebas, que lo indujeron a un error. Fue un fusilamiento moral; la información que recibió no corresponde con los hechos”.
Y.A.