Un ciudadano extranjero, señalado de suplantar a sus víctimas tras contactarlas en aplicaciones de citas, llegó a generar ingresos ilícitos mensuales que alcanzaban hasta los 500 millones de pesos en la capital del país.
De acuerdo con información conocida por Noticias RCN, el hombre, de nacionalidad venezolana, utilizaba diferentes identidades para acercarse a turistas de la comunidad LGBTIQ+ que visitaban Bogotá. Su estrategia consistía en ganarse la confianza de sus objetivos, a quienes citaba en hoteles. Allí, según relató una investigadora de la Policía, les suministraba medicamentos controlados hasta dejarlos en estado de indefensión.
Una vez vulneradas, las víctimas eran despojadas de objetos de valor como dinero en efectivo, computadores, tarjetas bancarias y documentos. Las autoridades estiman que al menos 100 extranjeros fueron afectados por este modus operandi, todos con características similares: alto poder adquisitivo, visitas cortas al país y búsqueda de encuentros a través de plataformas digitales.
Sin embargo, el verdadero negocio del delincuente no estaba solo en el hurto. Con los pasaportes robados, lograba hacerse pasar por las víctimas para realizar compras de lujo y fraudes con tarjetas de crédito, extendiendo su red criminal durante al menos una década.
Incluso, al momento de ser capturado, intentó confundir a los uniformados presentándose con un pasaporte estadounidense que había robado días antes. El teniente coronel Norberto Caro, jefe de la seccional de protección especial, confirmó que las ganancias ilícitas de este sujeto fluctuaban entre 300 y 500 millones de pesos al mes.
Hoy, enfrenta cargos por hurto calificado y agravado, así como por suplantación de identidad. No obstante, como en ocasiones anteriores, no aceptó los delitos que se le imputan, fiel a la vida de engaños que construyó bajo sus múltiples rostros