El presidente de la Federación Colombiana de Fútbol destacó el papel de Barranquilla como sede histórica de la Selección, pero reconoció que Bogotá y Medellín podrían recibir al equipo en próximos torneos, siempre y cuando se amplíen y modernicen los estadios.
El debate sobre la sede de la Selección Colombia en las Eliminatorias mundialistas volvió a abrirse, esta vez por cuenta de un pronunciamiento de Ramón Jesurún, presidente de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF). Aunque Barranquilla se ha consolidado desde 1990 como el fortín de la Tricolor, el dirigente dejó abierta la posibilidad de que ciudades como Bogotá y Medellín alberguen partidos oficiales en el futuro.
En una entrevista radial, Jesurún destacó el ambiente vivido en el estadio Metropolitano durante la clasificación al Mundial 2026: “Barranquilla cumplió. Ayer fue maravilloso el público, era la Barranquilla que a veces se había perdido, volvió a ser la Barranquilla que calentó a nuestros muchachos todo el partido. Barranquilla cumplió nuevamente, es la sexta vez que se clasifica con Barranquilla como sede”.
Sin embargo, el presidente de la FCF reconoció que otras ciudades también tienen el derecho de recibir a la Selección. “Las sedes de la selección son todas. El país merece tener a nuestras selecciones en todas las ciudades, pero tenemos un problema y es que tenemos que refaccionar nuestros estadios, agrandar nuestros estadios; después de que Colombia era la segunda o tercera en Sudamérica con estadios importantes y vale la pena que ese tema se abra con nuestros alcaldes”, afirmó.
Jesurún aseguró que ya ha sostenido reuniones con mandatarios locales para evaluar proyectos de modernización: “Ya hemos venido conversando el alcalde de Barranquilla, que está hablando de refaccionar el Metropolitano. Sabemos lo que está pasando en El Campín de Bogotá, hablé con el alcalde Federico Gutiérrez de Medellín y me dice que el año entrante va a refaccionar los estadios. Dentro de poco no va a haber capacidad, de tanto público y demanda, ni siquiera para el fútbol, para todos los espectáculos”.

De concretarse estas remodelaciones, tanto la capital como Medellín entrarían en la lista de aspirantes para acoger partidos de la Selección Colombia en las Eliminatorias al Mundial 2030. Bogotá, por ejemplo, contará con un nuevo estadio en 2027, con capacidad para 50.000 espectadores, mientras que Medellín avanza en los diseños de la reestructuración del Atanasio Girardot, que se presentarán en septiembre.
Con estas declaraciones, Jesurún reavivó un debate que divide a la hinchada: mantener a Barranquilla como la sede indiscutible por tradición y resultados, o abrir la puerta a nuevas plazas que, con infraestructura moderna, podrían convertirse en escenarios de la pasión tricolor.
Y.A.