La comunidad internacional se encuentra conmocionada por el brutal asesinato de Xiomara Huertas Mechato, una joven de 18 años que estudiaba Administración de Empresas.
Xiomara fue reportada como desaparecida el pasado 19 de agosto en Perú, lo que llevó a una búsqueda intensa de familiares y vecinos. Sin embargo, no pasaron muchos días cuando su cuerpo fue encontrado sin vida, el 23 de agosto, enterrado a más de cuatro metros de profundidad en el patio de la casa de sus tíos.
Las investigaciones revelaron que el cuerpo estaba dentro de una bolsa, boca abajo, con un trapo en la boca y amarrado del cuello, cubierto con un cuero de vaca y desechos fisiológicos para ocultar el olor.
El principal sospechoso y presunto autor de este crimen es Jorge Silva Álvarez, de 43 años, tío político de la víctima y esposo de su tía. Según medios locales, Silva Álvarez habría confesado el hecho a sus familiares.
La necropsia reveló que la causa de muerte fue asfixia. Según versiones extraoficiales, el presunto asesino fingió preocupación y acompañó a la familia en la búsqueda de la joven.
Tras el hallazgo del cuerpo y su captura, la comunidad intentó linchar al sospechoso. En entrevista con medios locales, un familiar de la menor declaró que: «Habíamos traído dos veces al perro y no podíamos detectar el cuerpo, porque este señor hacía sus necesidades prácticamente encima».