Las autoridades estadounidenses han intensificado sus acusaciones contra el régimen venezolano, señalando al presidente Nicolás Maduro y a altos funcionarios de su gobierno como presuntos líderes de una red criminal conocida como el “Cartel de los Soles”.
De acuerdo con informes recientes de agencias de inteligencia norteamericanas, este grupo estaría involucrado en operaciones de narcotráfico a gran escala, con alianzas estratégicas que incluyen a antiguos miembros de las FARC colombianas y al poderoso Cártel de Sinaloa mexicano. La investigación detalla que, desde Venezuela, se habrían coordinado envíos de cocaína hacia Estados Unidos a través de rutas que cruzan el Caribe y Centroamérica.
Además, las autoridades estadounidenses indican que Maduro y Diosdado Cabello, ministro del Interior venezolano, habrían facilitado el entrenamiento de mercenarios vinculados a estas organizaciones, con el objetivo de fortalecer el control del régimen sobre actividades ilícitas y disuadir las acciones antidrogas internacionales.
Una parte fundamental de esta trama involucra la cooperación financiera para lavar dinero proveniente del narcotráfico. El reporte señala que durante la década pasada se realizaron operaciones que incluyeron la compra de maquinaria agrícola en Malasia, financiada con fondos de origen ilícito, para legitimar negocios en Venezuela.
Exmilitares que formaron parte del gobierno chavista han corroborado estos señalamientos. Entre ellos, destaca el exgeneral Hugo Carvajal, quien aceptó su participación en el tráfico de drogas ante tribunales estadounidenses. Otro exmilitar, Clíver Alcalá, cumple condena por conspirar para proveer armas a grupos insurgentes en Colombia.
Las evidencias expuestas por Estados Unidos fortalecen la presión internacional sobre Caracas y plantean un complejo escenario geopolítico en la región. Por ahora, el gobierno venezolano no ha emitido comentarios oficiales sobre estas últimas revelaciones.