*Después de reportes de contaminación el pasado 5 de agosto, la Secretaría de Salud del Atlántico confirmó que las últimas pruebas reflejan un índice de riesgo en cero. El departamento mantendrá vigilancia estricta sobre la calidad del servicio.
La incertidumbre de los habitantes del barrio Villa Olímpica, en Galapa, por la calidad del agua potable llegó a su fin. La Gobernación del Atlántico informó que, tras los muestreos realizados el 13 de agosto, el líquido es apto para el consumo humano.
El anuncio lo dio la Secretaría de Salud departamental con base en los resultados de cinco pruebas tomadas en distintos puntos de la red de distribución, todas con un Índice de Riesgo de la Calidad del Agua (IRCA) del 0 %, lo que equivale a “sin riesgo”, según la Resolución 2115 de 2007.
La noticia llega luego de que el pasado 5 de agosto un estudio previo alertara sobre un nivel de riesgo alto en la zona, con presencia de turbidez y deficiencias en cloro residual, lo que llevó a clasificar el agua como no apta. Esa situación encendió alarmas en la comunidad y obligó a la empresa prestadora Aguacaribe y a la Alcaldía de Galapa a aplicar correctivos.
Durante los días siguientes, la Secretaría de Salud acompañó las acciones de control, entregó tabletas potabilizadoras a los residentes y exigió a la compañía un plan de mantenimiento en los módulos de floculación del acueducto, donde se habían detectado fallas.
Con las últimas pruebas, la Gobernación aseguró que la situación está controlada. No obstante, se mantendrá la vigilancia en los 22 municipios del Atlántico y, hoy se instalará una sesión extraordinaria del Consejo Territorial de Salud Ambiental (Cotsa) para evaluar la respuesta del operador y verificar la sostenibilidad de las mejoras.
La Secretaría de Salud recordó que, en junio y julio, las muestras en Villa Olímpica también habían registrado riesgo cero. Sin embargo, el corte prolongado en el suministro y actos de vandalismo en las conexiones domiciliarias pudieron haber incidido en los resultados negativos reportados a comienzos de este mes.
Con la confirmación de potabilidad, las autoridades buscan devolver la tranquilidad a los usuarios y garantizar que situaciones similares no vuelvan a repetirse. “Nuestro compromiso es mantener un monitoreo constante y adoptar medidas inmediatas cada vez que se detecten riesgos”, señaló la dependencia departamental.