Las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada (ACSN), antes Los Pachenca, fueron catalogadas como Grupo Armado Organizado (GAO) debido a su creciente poder de fuego, dominio territorial y proyección hacia zonas estratégicas como el Catatumbo.
En un consejo de seguridad realizado en Valledupar, con la participación del Ministro de Defensa y autoridades del Cesar, el Gobierno Nacional decidió catalogar a las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada (ACSN) —antes conocidas como Los Pachenca— como Grupo Armado Organizado (GAO). La medida responde a la creciente capacidad de fuego, estructura de mando y control territorial que esta organización ha consolidado en el Caribe colombiano, convirtiéndose en una amenaza de alto riesgo para la seguridad nacional.
La decisión, que incluye la activación total del marco de operaciones militares y el uso de bombardeos, busca frenar la expansión de las ACSN, cuya influencia histórica en Magdalena, Cesar y La Guajira ahora apunta a extenderse hacia zonas estratégicas como el Catatumbo y Norte de Santander.
En los últimos meses, su presencia se ha hecho visible mediante actos de intimidación como grafitis en el barrio Cinco de Enero de Valledupar (febrero), en el municipio de La Esperanza (junio) y en Ocaña (julio), hechos que han sido duramente cuestionados por defensores de derechos humanos debido a lo que califican como “pasividad institucional”.
La expansión de las ACSN no se ha limitado a amenazas simbólicas. Durante 2025, la violencia directa ha sido evidente: en mayo, un ingeniero químico residente en Estados Unidos fue asesinado en Valledupar pocos días después de llegar al país; en la escena se halló un mensaje alusivo a la organización. Casos previos incluyen el homicidio de un exfuncionario del DAS y la persecución a su hermano y familia, situaciones que, según las autoridades, confirman la intención del clan narcoparamilitar de sembrar el terror y consolidar su control.
Esta persecución sistemática ha obligado al exilio a líderes sociales, periodistas y defensores de derechos humanos, generando un éxodo forzado que ha vaciado de voces críticas varios territorios. Analistas en seguridad señalan que en Valledupar y otras zonas del Caribe, la población vive bajo una constante amenaza, enfrentando homicidios, desplazamientos, extorsiones y la imposición de reglas criminales.
La recategorización de las ACSN como GAO es un reconocimiento oficial de su consolidación como estructura armada de alto impacto. Sin embargo, expertos advierten que el desafío no solo será frenar su avance territorial, sino garantizar una protección efectiva a las comunidades y a quienes denuncian sus abusos.
Y.A.