El Gobierno de Colombia, a través de una declaración oficial emitida por el presidente de la República, fijó una firme posición frente a la disputa territorial sobre la isla conocida como Santa Rosa, ubicada en el río Amazonas. Según la postura nacional, dicha isla no pertenece formalmente ni a Colombia ni al Perú, y cualquier intento de apropiación unilateral constituye una violación al derecho internacional.
El pronunciamiento se produce en un contexto de creciente atención sobre la zona fronteriza, luego de que el gobierno peruano emitiera una ley que crea el denominado Distrito de Santa Rosa de Loreto, incorporando la isla como parte de su territorio. Colombia considera este acto como una acción unilateral que desconoce los acuerdos bilaterales vigentes.
“Colombia no reconoce la soberanía del Perú sobre la isla de Santa Rosa y desconoce a las autoridades de facto impuestas en la zona”, indicó la Presidencia, destacando que esta isla no fue asignada a ninguno de los dos países en el tratado de 1929, único instrumento válido para la distribución de islas fluviales entre ambas naciones.
El Gobierno colombiano también rechazó la exigencia peruana de registrar embarcaciones en la isla, calificándola como una medida que viola la libre navegabilidad del río Amazonas, principio consagrado en el Protocolo de Río de Janeiro de 1934.
Pese a las tensiones, Colombia reafirmó su disposición a mantener un diálogo diplomático y aceptó la invitación del Perú para participar en la próxima reunión de la Comisión Mixta Permanente para la Inspección de la Frontera Colombo-Peruana (COMPERIF), programada para los días 11 y 12 de septiembre de 2025 en Lima.
La declaración concluye con un llamado a la paz, la integración regional y la diplomacia como vía para resolver diferencias, subrayando que la soberanía nacional y el respeto al derecho internacional seguirán siendo principios innegociables para el Estado colombiano.