A pesar de la salida de Rafael Martínez por doble militancia, el Gobierno aún no define si solicitará una terna o designará a un funcionario, mientras crecen los rumores y la incertidumbre en el Magdalena.
Desde el histórico edificio de La Giralda, en pleno corazón de Bogotá, el ministro del Interior, Armando Benedetti, lanzó un mensaje contundente frente a la grave situación institucional que atraviesa el departamento del Magdalena. A pesar de que el Consejo de Estado anuló la elección de Rafael Alejandro Martínez por incurrir en doble militancia, el Ejecutivo aún no ha tomado una decisión sobre quién asumirá el mando de la Gobernación.
“Es pura paja que vamos a nombrar a un influencer. Todavía no hay decisión”, afirmó Benedetti con su habitual tono desafiante, desmintiendo las versiones que circulan sobre un posible reemplazo ya definido. Y agregó: “Estamos esperando que el Consejo de Estado nos defina, porque ellos (Fuerza Ciudadana), perdieron la personería jurídica. Aún no sabemos si tenemos que pedirles una terna, o hay que nombrar a un funcionario del gobierno”.
La anulación de la elección de Martínez no es un hecho menor. Se trata de una figura clave del movimiento Fuerza Ciudadana, liderado por el exgobernador Carlos Caicedo, que ahora se enfrenta a una debacle política tras la pérdida de su personería jurídica. Este nuevo escenario deja al Gobierno Nacional ante una encrucijada: respetar las reglas democráticas o aprovechar el vacío legal para imponer un perfil afín a su conveniencia.
El departamento, con múltiples retos en materia de salud, infraestructura y seguridad, no puede esperar indefinidamente por una decisión política que, hasta ahora, parece más guiada por cálculos partidistas que por el bienestar de sus habitantes.
Y.A.