Agosto 3 1829: Estreno de Guillermo Tell última ópera de Rossini

Basado en la obra del poeta y dramaturgo alemán, Friedrich Schiller, nacido en noviembre de 1759 y muerto el 9 de mayo de 1805. quien recogió un sinnúmero de leyendas nacidas desde comienzos del siglo XIV y dio a conocer en el mundo al controversial personaje Guillermo Tell, el músico italiano, Gioachino Rossini, compuso lo que fue su última ópera.

De Tell sólo se conoce lo contado en el drama por Schiller, pues no hay una fuente que certifique si fue un individuo real o ficticio, producto de la imaginación popular suiza. Pero en el Siglo XIX, era un tema de moda gracias a la extraordinaria acogida que tuvo el drama elaborado por el escritor alemán, y esto, más una oferta que le hizo la öpera de París, motivó a Rossini a musicalizarlo.

Sin embargo y a pesar de lo atrayente de la temática, la ópera fue un verdadero y real fracaso.
Tras llegar a un acuerdo con el gobierno francés para una pensión vitalicia, Rossini terminó la obra que se estrenó el 3 de agosto de 1829 en una versión inicial hecha de manera directa para el público parisino.

El estreno tuvo lugar en el Théatre de l’Academie Royale de París, sin el glamoroso éxito que se esperaba
Después, se harían réplicas más cortas y en italiano, pero todas, tal como aconteció con la francesa, serían recibidas con frialdad por quienes asistían a las presentaciones.

Quizá la razón de este comportamiento fue que los seguidores esperaban una ópera al estilo de Rossini -el llamado Grand Ópera, con las llamadas Cabaletas (ritmo muy animado) y los crescendos, pero nada de esto hubo. El autor había dejado todo atrás.

Rossini quiso hacer una ópera de características diferentes, una ópera seria, de gran extensión y muy dramática, lejos de lo habitual en él y quizá por eso no consiguió el impacto requerido.

A partir de esta producción, Gioachino Rossini entró en un silencio definitivo, cuyas razones nadie ha alcanzado a explicar. Se dice que tuvo problemas de salud,, cansancio, falta de inspiración o que se resignó con los emolumentos que recibía del Gobierno, pero lo único cierto de todo, es que jamás volvió a escribir música.

La ópera, cuyo libreto no se aparta casi nada del drama escrito por Schiller, se representó varias veces en el Metropolitan Opera House, de Nueva York entre 1894 y 1930 y se estrenó en el Teatro Colón de Buenos Aires en 1923, pero a partir de allí casi desapareció de los grandes escenarios.

A comienzos de este siglo, entre 2005 y 2010, es apenas la número 201 entre las óperas por su representación y es la octava entre las 14 que se han hecho de las obras de Rossini.
El libreto elaborado por Étienne de Jouy en francés, no tiene casi diferencias con lo escrito por Schiller y la trama es la misma.

Según la leyenda recogida por Schiller, Guillermo Tell fue el héroe de la lucha suiza por liberarse del dominio de los Habsburgo. En una ocasión, se negó a arrodillarse a adorar la estatua del gobernador Gesller, quien sabiendo que Tell era un excelente arquero, le ordenó disparar una flecha a una manzana colocada en la cabeza de su hijo.

Salió vencedor de la prueba, pero fue encerrado pues había amenazado con matar a Gessler si fallaba. De todas maneras más tarde es liberado, y logra quitar de en medio a Gessler y consolida la independencia de la nación.

-Lo que más se recuerda de esta ópera es su famosa Obertura, que es quizá el tema de concierto más interpretado en todas las épocas. El final de la pieza, es muy popular hoy, gracias al uso de que se hace de ella en radio y sobre todo en televisión- sostienen especialistas.