Por medio de la Cancillería, el Gobierno nacional insistirá a las autoridades ecuatorianas que se establezca un protocolo y un calendario para la salida de los connacionales. Estas declaraciones se dieron después de la llegada de 603 ciudadanos colombianos, que fueron deportados entre la tarde del 25 y la mañana del 26 de julio por las autoridades ecuatorianas, a través del Puente de Rumichaca.
Además de brindarles alimentos a los connacionales tras su llegada, se verificó la identidad de cada una de las personas que llegaron y se hizo un control migratorio con el fin de verificar antecedentes por parte de la Policía Nacional.
Tras esto, se identificó que 11 de los deportados tienen orden de captura, y uno de ellos cuenta con circular de la Interpol. De igual manera, las autoridades garantizaron el desplazamiento de todas las personas a sus lugares de origen, según lo establecido.
Frente al acuerdo al que se busca llegar con Ecuador, la canciller Rosa Yolanda Villavicencio, aseguró que el fin del protocolo es garantizar un trato digno y al mismo tiempo, ofrecer una atención adecuada e integral a los retornados, conforme lo estipula la Ley 2136 de 2021, la cual constituye las responsabilidades de las entidades en el retorno masivo.
Adicionalmente, el comandante de la Policía Nacional en el departamento del Nariño, el coronel Pablo Galindo, dijo que cuentan con 60 efectivos, garantizando la seguridad de la zona. Por otro lado, funcionarios del Departamento de Prosperidad Social y del Ministerio de la Igualdad se hicieron presentes para apoyar en el recibimiento y posterior llegada a sus residencias, según lo solicitaran.