Un juez de conocimiento de Bucaramanga, condenó a 56 años y 3 meses de prisión a un hombre de 59 años, hallado responsable de los delitos de feminicidio agravado y desaparición forzada agravada, tras el atroz asesinato de una menor de tan solo 8 años en el barrio Rincón de Girón, Santander.
La víctima, hija de una ciudadana venezolana, solía quedar bajo el cuidado de la esposa del ahora sentenciado, debido a que su madre debía ausentarse por razones laborales. El crimen ocurrió el pasado 1 de mayo de 2024, cuando en un momento de descuido de la cuidadora, el hombre engañó a la niña con la excusa de ir a comprar fruta y posteriormente la sustrajo.
La madre de la menor, identificada como Kelly Johana Materan Rivero, realizó la denuncia ante la línea 123, desencadenando una movilización por parte de las autoridades locales, por la desaparición de su hija Kerly Andreina Cuevas Materan, una niña de tan solo 8 años de edad, había salido de su hogar en compañía de un niño vecino para jugar, pero no regresó.
Trágicamente, alrededor de las 8:40 p.m., el cuerpo sin vida de la menor fue encontrado en una zona boscosa cerca de la estación de Metrolínea en el municipio de Girón, por funcionarios del Ejército, según lo confirmó el dictamen del Instituto de Medicina Legal, el cuerpo de la pequeña tenía múltiples signos de violencia.
En el lugar también fue encontrada la cédula de ciudadanía del agresor, quien además fue captado por cámaras de seguridad caminando junto a la niña antes de su desaparición.
