El presidente defendió su trayectoria como congresista y reafirmó que su lucha política, ahora como jefe de Estado, sigue enfocada en la justicia social, pese a los ataques provenientes del legislativo y medios afines al poder económico.
En un extenso mensaje publicado en sus redes sociales, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, rechazó los ataques verbales recibidos por parte de algunos congresistas durante su intervención ante el Congreso de la República, donde varios opositores gritaron consignas como “fuera Petro”. El mandatario calificó estos actos como una muestra de la degradación de la política colombiana.
Petro hizo un repaso de su historia como legislador, afirmando que ejerció por más de 20 años como congresista, sin haber pertenecido nunca al oficialismo. “Solo en dos ocasiones, los jueces pidieron rectificaciones leves a mis argumentos y acaté las decisiones”, indicó, al tiempo que aseguró haber buscado siempre la objetividad en sus debates de control político.
“Nunca vi que a un jefe de Estado la oposición lo tratara con tanta grosería y sin argumento”, denunció el presidente, criticando los gritos e insultos proferidos por legisladores durante su reciente comparecencia. Petro señaló que su conciencia está tranquila, y que los ataques se deben a un intento de minimizar los logros de su administración, particularmente en salud, educación y oportunidades económicas.
El mandatario defendió su gesto de alzar el puño, explicando que lo hace como símbolo histórico de resistencia y lucha por la justicia social y la libertad plena. “Aunque falta un año, espero resistir con la ayuda del pueblo”, concluyó, en alusión al tramo final de su mandato.
Y.A.
