Edwin Cataño Guevara, señalado por la muerte de Juan David Ucrós, fue buscado en dos allanamientos sin éxito antes de entregarse a la Fiscalía por homicidio agravado.
Nuevos elementos salen a la luz en torno al proceso judicial contra Edwin Alberto Cataño Guevara, el bombero señalado de causar la muerte de Juan David Ucrós Cervantes, un joven de 19 años atropellado en Barranquilla. El hecho, que ha causado conmoción pública, tomó un nuevo rumbo tras la entrega voluntaria del acusado a la Fiscalía General de la Nación la noche del jueves 17 de julio.
Antes de su entrega, unidades de Policía Judicial realizaron dos allanamientos fallidos en los barrios El Manantial, en Soledad, y Carlos Meisel, en Barranquilla, con el objetivo de dar cumplimiento a la orden de captura por homicidio agravado solicitada por la Fiscalía. En ambas diligencias, los investigadores no lograron ubicar al hoy procesado.
Horas después, y en medio de una creciente presión mediática y de las protestas ciudadanas lideradas por familiares y amigos de la víctima, Edwin Cataño se presentó ante el ente acusador, dando inicio al proceso judicial que lo enfrentará por la muerte del joven.
El caso ha generado un profundo rechazo social, especialmente por las circunstancias en las que ocurrió la tragedia. Según el reporte oficial, Cataño Guevara, en estado de embriaguez, conducía el vehículo que arrolló a Juan David Ucrós, quien había descendido de un bus de servicio público para dirigirse a su trabajo. Mientras Cataño y su acompañante fueron trasladados con lesiones a la Clínica Altos de San Vicente, el joven quedó sin vida sobre el pavimento.
Cabe recordar que Cataño Guevara ya había sido capturado el 11 de julio, pero recuperó la libertad debido a irregularidades en el procedimiento judicial, lo que desató una ola de indignación pública. Posteriormente, fue desvinculado del Cuerpo de Bomberos de Barranquilla, en un intento institucional por marcar distancia ante el rechazo ciudadano.
Actualmente, el señalado se encuentra a la espera de las audiencias de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento, que definirán su situación jurídica en los próximos días.
La muerte de Juan David no ha pasado desapercibida. Desde el momento del accidente, se han organizado plantones, cadenas de oración y movilizaciones para exigir justicia. Incluso, el alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, se pronunció enérgicamente:
“Solicité a la justicia nacional y a la Fiscalía actuar con prontitud para que la vida de este joven soñador no quede impune y este lamentable hecho llegue hasta las últimas consecuencias”.
La ciudadanía, por su parte, espera que este caso no se convierta en uno más en la lista de muertes sin castigo, y que se garantice justicia para la familia de Juan David Ucrós, cuya vida fue arrebatada de forma abrupta cuando apenas comenzaba a construir su futuro.
Y.A.