El caso de Diana Estefany Pérez, quien perdió la vida tras un accidente en un bicitaxi supuestamente ilegal y la atención tardía en un hospital de Soacha, evidencia fallas graves en la regulación del transporte informal y en el sistema de salud.
Una vida truncada por la negligencia, la informalidad y la indolencia institucional…
El municipio de Soacha llora la pérdida de Diana Estefany Pérez, una niña de 11 años que murió luego de caer de un bicitaxi sin frenos en el sector de Quintanares. El hecho no solo enluta a una familia, sino que también pone en evidencia la peligrosa combinación entre la falta de regulación efectiva del transporte informal y una atención médica insensible y negligente.
El accidente ocurrió el pasado domingo 13 de julio. Diana había pasado la tarde con su madrina, Johana Quinchía, hasta que su madre, Dayana, la recogió para ir a casa. Tomaron un bicitaxi, pero a los pocos minutos, la tragedia los alcanzó. El conductor, según los testimonios, no advirtió que el vehículo estaba sin frenos. La niña salió disparada del triciclo y sufrió un fuerte golpe en la cabeza.
“Estaba inconsciente, con la mirada desviada y sangrado nasal, pero no la atendieron porque no tenía a la mano su registro civil”, denunció Johana, quien también es enfermera. Aunque insistió en que le realizaran una TAC cerebral, la menor fue atendida solo después de que se presentara el documento. Para entonces, ya era demasiado tarde. Diana fue llevada a UCI, pero falleció en la madrugada del lunes 14 de julio.
La familia ahora exige justicia, y aunque el conductor fue identificado, no hay una denuncia formal aún, debido al dolor del duelo. “Con una denuncia no me van a devolver a mi bebé, pero sí quiero que se haga justicia”, declaró Johana, entre lágrimas.
Además del profundo dolor, la familia pide apoyo económico para realizar las exequias de Diana, pues recientemente también perdieron al esposo de Johana. Están recibiendo donaciones a través del número Nequi 310 2433742.
La pregunta obligada: ¿por qué seguían circulando bicitaxis sin frenos?
El bicitaxi, aunque permitido bajo condiciones estrictas según la Resolución 20243040038565 del Ministerio de Transporte, sigue funcionando en la mayoría de las ciudades en una total informalidad. Las normas exigen vehículos homologados, con frenos adecuados, licencia de conducción, afiliación a empresas y revisiones técnicas, entre otros requisitos.
Lo cierto es que en Soacha —como en muchas otras zonas del país— la mayoría de estos vehículos no cumplen la ley, poniendo en riesgo a cientos de ciudadanos cada día. En este caso, un vehículo informal, sin frenos, ni advertencia previa, le arrebató la vida a una niña inocente.
889071027-Resolución 20243040038565 del Ministerio de Transporte by LIBERTAD DIARIO
Indolencia médica: ¿hasta cuándo?
El otro componente trágico de esta historia es el relato de negligencia médica. Una menor con signos de trauma craneoencefálico grave no fue atendida con urgencia por falta de papeles. ¿Desde cuándo los documentos tienen más peso que la vida? La salud en Colombia no puede seguir condicionada por trámites mientras pacientes se debaten entre la vida y la muerte.
La historia de Diana Estefany no puede caer en el olvido. Es hora de que el Estado deje de mirar hacia otro lado y que la justicia actúe con contundencia. Que este dolor no se repita. Que su muerte sirva como punto de inflexión para que la informalidad en el transporte y la insensibilidad institucional no sigan costando vidas.
Y.A.