El exsubdirector de la UNGRD enfrenta nuevos cargos por interés indebido en la celebración de contratos por más de $8.671 millones en cinco municipios cordobeses.
Sneyder Pinilla, exsubdirector de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), fue imputado este lunes por la Fiscalía General de la Nación por el presunto direccionamiento irregular de contratos relacionados con la atención de emergencias en cinco municipios del departamento de Córdoba.
Según el ente acusador, los hechos ocurrieron entre agosto y diciembre de 2023, cuando Pinilla, junto a otros dos funcionarios de la subdirección general de la entidad, habría direccionado cinco órdenes de proveeduría para el suministro de volquetas y maquinaria amarilla, así como sus respectivas interventorías. Estos contratos estaban destinados a mitigar emergencias en Puerto Escondido, Moñitos, Canaletes, Ciénaga de Oro y Los Córdobas.
El monto total de los negocios jurídicos ascendió a $8.671 millones, sin que los recursos hayan sido efectivamente desembolsados a los contratistas. La Fiscalía señaló que “Pinilla Álvarez, aprovechado su cargo y extralimitando sus funciones, presuntamente aceptó, tramitó y avaló la contratación con particulares no registrados en la lista de proveedores de la UNGRD que fueron seleccionados previamente por un funcionario de la entidad”.
Por estos hechos, la Fiscalía le imputó el delito de interés indebido en la celebración de contratos, cargo que no fue aceptado por el procesado.
Este nuevo proceso judicial se suma a la condena que ya pesa sobre Pinilla desde abril pasado, cuando fue sentenciado a cinco años y ocho meses de prisión, luego de llegar a un acuerdo con la Fiscalía en el marco del escándalo por los carrotanques de La Guajira. Además, le fue impuesta una multa de 3.361.875 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
El caso vuelve a poner en el centro del debate público la necesidad de reformas estructurales en la contratación estatal y en los mecanismos de control interno dentro de organismos de emergencia como la UNGRD, que deberían operar con transparencia, sobre todo en contextos de vulnerabilidad y crisis humanitaria.
Y.A.