Julio 1º de 1876, Fallece Mijail Bakunin, «Padre de la Anarquía»

Por PepeComenta
Tras una vida agitada, intensa, dedicada a la Filosofía y a la actividad política, murió en Berna en una pobreza absoluta y consolado nada más por las cartas que le dirigían sus simpatizantes

Bakunin y la Anarquía (Imagen tomada de https://posmodernia.com/el-anarquismo-de-bakunin-v/)
Bakunin y la Anarquía (Imagen tomada de https://posmodernia.com/el-anarquismo-de-bakunin-v/)

Mijail Bakunin fue una figura clave del anarquismo en el siglo XIX, más conocido por su acción revolucionaria que por una obra teórica sistemática. Nacido el 30 de mayo de 1814 en el seno de una familia rusa de la nobleza recibió una sólida educación militar, pero pronto abandonó tal carrera para entregarse de lleno a la Filosofía y a la actividad política.

Falleció el 1º de julio en Suiza, viviendo en la pobreza más extrema y sin mayor consuelo para su tribulación que la correspondencia que mantenía con pequeños grupos de simpatizantes de sus ideas.

Se destacó por su oposición al Estado y a promover la idea de una sociedad sin clases, basada en la autogestión, la libertad individual y en la igualdad. De igual manera se enfrentó al marxismo, basado en la creencia de que enseñar teorías rígidas -según manifiestan sus biógrafos que pensaba- reprime el instinto natural de las personas a rebelarse.

Su vida fue intensa hasta el extremo. Participó en las revueltas que se dieron en Europa en 1848 -durante el período conocido como La Primavera de los Pueblos- eventos que se dieron en Sicilia, Francia, Alemania, Italia y Austria, que fueron reprimidos con violencia y no prosperaron, pero…podría decirse que crearon las bases sobre las que se asentaron varios de los modernos estados de hoy.

No dejó libros completos, pero sus escritos parciales y su poderosa presencia inspiraron a generaciones de insurrectos. Para él, la revolución debía nacer del instinto humano, no de sistemas teóricos. Su influencia se sintió incluso en las protestas estudiantiles de París en 1968 y entre movimientos como las Panteras Negras y pensadores anticoloniales como Frantz Fanon.

Se le llama “Padre de la Anarquía” a Mijaíl Bakunin porque fue uno de los primeros y más influyentes pensadores y activistas del anarquismo moderno. No inventó la palabra ni fue el único en desarrollar ideas libertarias, pero sí fue quien dio forma a una visión revolucionaria del anarquismo como movimiento de masas, no sólo como filosofía individual.

La anarquía según Bakunin se refiere a una visión del anarquismo que enfatiza la abolición del Estado y la autoridad, la propiedad privada y la colectivización de los medios de producción. Bakunin propuso un sistema social basado en la asociación libre de individuos y grupos, la acción directa y la revolución social para alcanzar una sociedad sin opresión ni jerarquía

A diferencia de otros pensadores más teóricos, Bakunin vivió sus ideas: participó en insurrecciones, fundó organizaciones clandestinas, y defendió la abolición del Estado, la propiedad privada y la religión como pilares de la opresión. Su propuesta de federaciones libres de trabajadores y comunas autónomas fue una alternativa radical al socialismo autoritario de Marx.

Además, su carisma, su vida aventurera y su rechazo a toda forma de autoridad lo convirtieron en una figura mítica. Por eso, más que un título académico, lo de “Padre de la Anarquía” es un reconocimiento simbólico a su papel fundacional en el anarquismo como corriente política y ética.

Desde luego, estos criterios del todo diferentes a los que imperaban en esa Europa del Siglo XIX, chocaron contra esa sociedad tradicionalista y conservadora. Por ello, los anarquistas fueron perseguidos, según reseña el portal La Tinta en la mañana de ayer 30 de junio de 2025:

-Si algo han experimentado los anarquistas a lo largo de la historia fue ser perseguidos por sus ideas, censurados y criminalizados por hechos de los que no fueron culpables. Pocas cosas pueden herir más a quien simpatiza con las ideas libertarias que ser confundido con un policía de civil- reseña la publicación.

Pero también hubo -y desde luego aún hay- triquiñuelas. Muchas veces, los mismos dirigentes introducían a sus agentes de seguridad en las manifestaciones de los anarquistas para provocar incidentes que justificaran que la «Justicia actuara contra quienes protestaban»

-Somos muchos quienes creemos que los incidentes producidos, o al menos parte de ellos, fueron provocados por las propias fuerzas de seguridad: por la cantidad de policías y gendarmes de civil infiltrados en distintas movilizaciones, por los reiterados episodios sin sentido de supuestas agrupaciones desconocidas, por lo burdo de algunas situaciones, y porque “casualmente” los detenidos nunca son quienes provocan los incidentes. En algunos casos hasta fueron descubiertos infiltrados con nombre y apellido. Lo cierto es que la confusión generada por los medios hegemónicos apuntó directo y sin argumentos a “los anarquistas”, lo que incluso estigmatizó al toda una corriente ideológica incluso frente a personas que se movilizaron por Santiago Maldonado– afirmó ayer  Ramiro Giganti para ANRed

Quizá por eso, cada vez que la libertad se ve acorralada, -sostienen algunos- el eco de Bakunin vuelve a escucharse, no como consigna, sino como advertencia.