La participación ciudadana, un pilar clave para fortalecer la democracia en Colombia

En un análisis profundo sobre la evolución democrática de Colombia, el doctor en Ciencias Políticas Eurípides Castro Sanjuan plantea la necesidad urgente de fortalecer los mecanismos de participación ciudadana establecidos en la Constitución de 1991, destacando su papel en la consolidación de un Estado Social de Derecho.

Según el experto, la figura de la participación ciudadana ha evolucionado desde sus orígenes ilustrados, inspirada en las ideas de soberanía popular propuestas por pensadores como Jean-Jacques Rousseau, hasta convertirse en una herramienta esencial para el ejercicio democrático. Castro Sanjuan advierte que, aunque en Colombia se han dado avances, el uso de esta figura aún enfrenta obstáculos, especialmente en el ámbito electoral, donde persisten procedimientos complejos y restricciones legales que dificultan su efectividad.

 

El artículo 40 de la Carta Magna colombiana, que consagra el derecho de los ciudadanos a participar en las decisiones que los afectan, es citado como fundamento de este llamado a la acción. No obstante, el académico señala que la acción de tutela —frecuente en el contexto colombiano— no puede reemplazar los verdaderos mecanismos participativos que emanan del pueblo.

Asimismo, Castro Sanjuan subraya que la Constitución del 91 marcó un cambio radical al reconocer que la soberanía reside exclusivamente en el pueblo, y no en los órganos del poder. Esta transformación, afirma, debe traducirse en una participación más activa y vinculante de los ciudadanos en la vida pública y en los asuntos que afectan a la comunidad.

El politólogo concluye que es el momento de que la sociedad colombiana supere el “nudo gordiano” del absolutismo, para dar paso a una democracia real en la que la voluntad popular sea el verdadero motor de las decisiones del Estado.