En un fuerte pronunciamiento durante la apertura de la 55ª Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el vicesecretario de Estado de EE. UU., Christopher Landau, cuestionó abiertamente la utilidad de la entidad y advirtió que su país está revisando si permanecer o no como miembro activo.
“Si la OEA no está dispuesta o no puede resolver las crisis en Venezuela y Haití, ¿por qué existe?”, se preguntó Landau ante los representantes de los países miembros reunidos en Antigua y Barbuda.
El funcionario recordó que el presidente Donald Trump ordenó al Departamento de Estado revisar qué organizaciones internacionales benefician realmente a los intereses de EE. UU. para decidir sobre su continuidad o retiro.
“La OEA es, obviamente, una de las organizaciones que estamos revisando”, aseguró Landau, agregando que el resultado de esa evaluación aún no está definido, pero que el proceso es transparente para que “nadie se sorprenda”.
Críticas a la OEA por su actuación en Venezuela y Haití
El diplomático estadounidense citó como ejemplos de “ineficacia” los casos de Venezuela y Haití, señalando que la organización no ha tomado medidas efectivas ante crisis prolongadas.
En el caso venezolano, Landau afirmó que la oposición “ganó abrumadoramente” las últimas elecciones presidenciales y presentó pruebas, pero que el gobierno de Nicolás Maduro ignoró los resultados sin que la OEA tomara acciones sustanciales.
También se refirió a las recientes elecciones regionales y legislativas en Venezuela, incluyendo una polémica consulta sobre el territorio del Esequibo, disputado con Guyana. Según Landau, el hecho de que la OEA no responda ante “la amenaza a la integridad territorial de un vecino” pone en duda su propósito.
En cuanto a Haití, denunció la falta de respuesta de la organización ante el colapso político, económico y de seguridad. Señaló que es una situación “que se hunde en el caos” y que ha requerido la intervención de una fuerza internacional liderada por Kenia y respaldada por la ONU.
“Estados Unidos ha contribuido con casi 1.000 millones de dólares en apoyo, pero no puede seguir soportando esta pesada carga financiera solo”, advirtió.
EE. UU. ofrece apoyo, pero pide reciprocidad
Landau concluyó su intervención asegurando que EE. UU. sigue ofreciendo una “mano amiga” a la OEA, pero advirtió que la amistad debe ser recíproca y basada en hechos, no solo en declaraciones.
“Apoyemos a los pueblos de Venezuela y Haití no solo con palabras, sino con acciones. Rechacemos los regímenes autoritarios y a quienes usan la justicia como arma política”, enfatizó.
Mientras tanto, el secretario general de la OEA, Albert Ramdin, ha dicho que Haití es una prioridad para la organización y prometió presentar una hoja de ruta en las próximas semanas. Se espera que durante esta Asamblea General se debata un proyecto de resolución sobre la situación haitiana, aunque aún no hay consenso entre los Estados miembros.