Retenes en Soledad Atlántico: el tránsito entre la duda y la inconformidad

Los operativos serán desactivados a partir de mañana viernes indico el director de movilidad de Soledad, en dialogo con Atlántico en Noticias.

Por: Carmelo Bolaño

Cada mañana en Soledad, el sol se alza sobre la calle 30, via al aeropuerto Ernesto Cortizos, mientras los guardas de tránsito lucen sus chalecos reflectivos y despliegan conos como estandartes de autoridad. Los ciudadanos, en su mayoría, reconocen su presencia como necesaria. Es cierto: la movilidad requiere orden, vigilancia y responsabilidad. Pero, tras ese reconocimiento, se esconde una inconformidad que crece en la verdadera intension de cada silbato y cada señal de pare.

Lo que muchos consideran controles de tránsito legítimos, otros los llaman «retenes platilladores». Detienen muchas veces a los mismos vehículos, hasta por pasar dos veces por el mismo sitio, una práctica que genera suspicacia. La supuesta orden de la autoridad de tránsito parece más bien una excusa de rutina para imponer sanciones que alimentan las arcas, pero no necesariamente la seguridad vial.

Los conductores se preguntan si el objetivo real es ordenar el tráfico o recaudar dinero. La respuesta no está clara, pero lo que sí es enorme el malestar ciudadano, que ve cómo el énfasis de la administración municipal se centra en supuestamente, “mejorar la movilidad” mientras ignora la verdadera condición de la malla vial, cada vez está más deteriorada.

Calles con baches, parches improvisados y enormes huecos eternos los que son parte del paisaje diario, y sin embargo, la alcaldía parece tener ojos únicamente para el flujo vehicular, no para las condiciones de las vías.

Así, en Soledad Atlántico, se transita no solo por el asfalto roto, sino por una desconfianza creciente. La ciudadanía no está en contra de la autoridad, sino del uso que se le da. Se necesita control, sí, pero también transparencia, equidad y, sobre todo, inversión en infraestructura. Porque no se puede exigir orden cuando el camino mismo es un absoluto caos.