La investigación sobre el atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay continúa arrojando nuevos elementos. La Fiscalía General de la Nación confirmó la incautación de ocho teléfonos celulares que serán sometidos a análisis forense, con el objetivo de identificar a todos los implicados en este intento de magnicidio.
Según detalló el ente acusador, los dispositivos fueron encontrados durante una serie de operativos realizados en el marco de la investigación. Su contenido, que ya está siendo extraído y analizado, podría aportar pruebas determinantes para esclarecer los hechos y dar con los autores intelectuales del ataque.
Hasta el momento, las autoridades han capturado a cuatro personas presuntamente vinculadas al atentado, entre ellas un menor de edad que habría sido quien disparó el arma. Además, han sido interceptadas 29 comunicaciones, se han realizado 43 entrevistas, 8 interrogatorios y se han elaborado 3 perfiles criminales y 3 retratos hablados. También se han efectuado 7 allanamientos en distintos puntos del país.
En paralelo, el Ministerio de Defensa ha ofrecido una recompensa de hasta 3.000 millones de pesos a quienes proporcionen información que permita dar con los responsables. Uno de los principales objetivos de la investigación es alias “El Costeño”, quien sería, según las autoridades, el posible autor intelectual del ataque.
En declaraciones entregadas a un medio nacional, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, indicó que “El Costeño” habría liderado la operación criminal, aunque aclaró que se manejan varias hipótesis sobre cómo se planeó el atentado y quiénes estarían detrás de su ejecución.
En medio de esta situación, la familia de Miguel Uribe ha manifestado su confianza espiritual, encomendándose a San Charbel, un santo al que atribuyen varios milagros y del que esperan protección en estos momentos difíciles.
Las autoridades continúan las investigaciones con prioridad, dada la gravedad del ataque y la relevancia política de la víctima.