Concejal asesinado en San Andrés de Cuerquia: el sicario era un menor vinculado a disidencias de las Farc

La violencia volvió a sacudir al norte antioqueño. A plena luz del día, a solo metros del comando de Policía y en pleno corazón del municipio de San Andrés de Cuerquia, fue asesinado el concejal Juan Camilo Espinosa Banegas, quien se movilizaba en condición de discapacidad. La sorpresa mayor: el autor del crimen es un menor de edad ligado al Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc.

El ataque ocurrió el lunes hacia las 5:30 de la tarde, cuando Espinosa se dirigía con amigos a su residencia. De repente, un joven lo abordó por la espalda y le disparó en seis ocasiones con un revólver calibre .38. Espinosa, quien gozaba de reconocimiento en la comunidad, murió en el acto.

Las autoridades actuaron con rapidez. El atacante intentó huir por los alrededores del casco urbano, pero fue capturado cerca de una estación de servicio, en poder del arma homicida y un celular que ahora es pieza clave en la investigación. El hallazgo estremeció a los investigadores: el asesino tiene solo 17 años y sería un combatiente activo del Frente 36 de las disidencias.

“Este menor, que fue trasladado desde Cali, llevaba cerca de seis meses operando en Antioquia. Hemos verificado su pertenencia al Estado Mayor Central”, confirmó el coronel Óscar Mauricio Rico Guzmán, comandante de la Policía de Antioquia.

El caso ha desatado preocupación nacional, no solo por el hecho de que un menor ejecute este tipo de crímenes, sino por la clara estrategia de reclutamiento de adolescentes por parte de grupos armados ilegales, y su uso como instrumentos de sicariato.

Testigos afirmaron que otro individuo acompañaba al menor en el crimen y logró escapar por la vía vieja hacia San José de la Montaña, dejando abandonada una motocicleta con calcomanías alusivas a Pablo Escobar, lo que ha levantado aún más sospechas sobre las conexiones criminales detrás del ataque.

El gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, anunció una recompensa de hasta 50 millones de pesos por información que permita capturar al segundo implicado. “Estamos frente a un ataque cobarde que enluta a un municipio y que confirma la presencia de actores armados ilegales en zonas que pensábamos seguras. Vamos a actuar con toda la fuerza del Estado”, afirmó.

El crimen de Juan Camilo Espinosa revive el debate sobre el uso de menores por parte de estructuras ilegales. Aún resuena en la opinión pública el atentado reciente contra el senador Miguel Uribe Turbay, perpetrado también por un adolescente armado.

En tanto, el municipio de San Andrés de Cuerquia enfrenta el luto y el desconcierto. La comunidad exige justicia y mayores garantías de seguridad. El Estado deberá responder no solo con capturas, sino con una estrategia efectiva frente al avance silencioso de las disidencias y el reclutamiento de menores como arma de guerra.