Aunque Venezuela anunció la reanudación de los vuelos comerciales con República Dominicana, el gobierno dominicano aclaró este domingo que aún no ha autorizado el restablecimiento de dichas rutas aéreas, suspendidas desde julio de 2024.
El pronunciamiento fue hecho por Héctor Porcella, presidente de la Junta de Aviación Civil (JAC), quien explicó que el país caribeño evalúa cuidadosamente cualquier solicitud relacionada con la reapertura de operaciones aéreas hacia territorio venezolano. “Toda decisión será tomada en estricto apego al interés nacional y será comunicada por canales oficiales”, aseguró Porcella en un comunicado.
Hasta el momento, los vuelos entre ambos países continúan suspendidos, a la espera de una resolución formal por parte de las autoridades dominicanas.
Venezuela anuncia reapertura unilateral
Horas antes, el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil de Venezuela (INAC) había informado que reanudaba los vuelos de pasajeros, carga y correo con República Dominicana, sin especificar la fecha de entrada en vigor ni detalles logísticos.
Esta decisión se da tras casi un año de suspensión, impuesta por el gobierno venezolano el 31 de julio de 2024 en respuesta a las críticas internacionales por la elección presidencial en la que Nicolás Maduro fue declarado ganador, en medio de acusaciones de fraude por parte de la oposición y varios gobiernos latinoamericanos.
Crisis diplomática continúa sin resolverse
La suspensión de vuelos se enmarcó dentro de un clima de tensión diplomática. En su momento, Caracas calificó de “acciones injerencistas” los cuestionamientos emitidos por países como República Dominicana, Panamá, Argentina y Uruguay, entre otros, y respondió ordenando la expulsión de representantes diplomáticos y retirando a su personal de las embajadas en esas naciones.
Aunque Panamá reanudó recientemente sus vuelos con Venezuela, las relaciones diplomáticas no han sido restablecidas plenamente, y lo mismo ocurre con República Dominicana, que mantiene su postura de cautela frente a cualquier acercamiento bilateral.
La comunidad internacional observa de cerca estos movimientos, especialmente en un contexto regional marcado por la inestabilidad política y los retos en materia de conectividad aérea.
