El procesado había sido judicializado en Florencia, Caquetá, por delitos relacionados con armamento militar; ahora enfrenta cargos por tentativa de homicidio agravado en Bogotá.
Se conoció el rostro del segundo capturado por el atentado contra el precandidato presidencial Miguel Uribe. Se trata de Carlos Eduardo Mora González, quien según las autoridades habría sido el principal coordinador del ataque perpetrado el pasado 7 de junio en el parque El Golfito, ubicado en el occidente de Bogotá.
Mora González fue capturado y judicializado en las últimas horas luego de entregarse voluntariamente. La Fiscalía General de la Nación lo señala de haber planificado la logística del atentado dos días antes de su ejecución. Según la investigación, fue quien entregó el arma de fuego tipo Glock de 9 milímetros desde el interior de un Spark gris, vehículo registrado en más de 1.000 videos de cámaras de seguridad analizados por peritos.
El atacante, un menor de edad, habría recibido el arma de manos de Mora dentro del vehículo y posteriormente la utilizó durante la concentración política de Uribe. Por estos hechos, al capturado se le imputaron los delitos de tentativa de homicidio agravado, porte ilegal de armas de fuego y uso de menores para la comisión de delitos. Un juez de control de garantías ordenó su reclusión preventiva en centro carcelario.
Pero no es la primera vez que Carlos Eduardo Mora González enfrenta cargos judiciales. De acuerdo con documentos oficiales, en poder del Juzgado 01 Penal del Circuito Especializado de Florencia, Caquetá, ya existía un proceso abierto en su contra por fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido y de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos. Ese caso, registrado el 19 de septiembre de 2024, fue objeto de una ruptura procesal, debido a que su radicado se desprendió de una matriz judicial en curso.
El documento judicial, fechado ese mismo día, fue expedido tras petición del juzgado especializado y confirma que Mora ya enfrentaba la justicia por posesión de armamento de alta peligrosidad. Actualmente, su proceso penal se encuentra en etapa de juicio y su detención por el caso Miguel Uribe complica aún más su situación legal.
Con esta captura, la Fiscalía avanza en el esclarecimiento del atentado político que sacudió la agenda nacional, mientras continúa la búsqueda de otros posibles implicados.
Y.A.
