Confevip advierte que la ampliación del horario nocturno y el recargo dominical al 100% afectarían a más de 250.000 trabajadores del sector, y propone un régimen diferenciado para evitar la pérdida de empleos y viabilidad de empresas.
En medio del avance del proyecto de reforma laboral en el Congreso de la República, la Confederación Nacional del Gremio de la Vigilancia Privada (Confevip) manifestó su profunda preocupación por los efectos que esta iniciativa tendría sobre uno de los sectores más relevantes de la economía nacional. Según Miguel Ángel Díaz, presidente del gremio, los cambios que plantea la reforma, especialmente la ampliación del horario nocturno desde las 7:00 p.m. y el recargo del 100% por trabajo en domingos y festivos, impactan directamente a la vigilancia y seguridad privada, una actividad que opera de forma continua y con turnos rotativos.
“La ampliación del horario nocturno representa un incremento directo en los costos operativos del sector de vigilancia y seguridad privada, un gremio que opera en jornadas continuas bajo esquemas rotativos, y que debe reconocer recargos por concepto de día dominical o festivo de forma permanente”, aseguró Díaz durante una declaración pública.
Ante este panorama, Confevip propone la creación de un régimen especial laboral para los trabajadores del sector, similar al que se contemplaba en una propuesta alternativa del Partido Liberal, en la cual se sugería mantener el inicio del recargo nocturno a partir de las 9:00 p.m.. Esta medida, según el gremio, no solo mitigaría los impactos económicos sobre las empresas de vigilancia, sino que también aseguraría la sostenibilidad del empleo en un rubro clave para la economía y la seguridad del país.
“Desde Confevip se hace un llamado al Congreso de la República y al Gobierno Nacional para que se contemple un régimen especial para el sector, tal como fue planteado por el Partido Liberal”, enfatizó Díaz, quien también destacó que esta propuesta está alineada con las recomendaciones de organismos internacionales como la OCDE y la OIT, que abogan por modelos de flexibilidad laboral.
Uno de los argumentos más fuertes del gremio tiene que ver con el impacto directo que los cambios normativos podrían tener en la empleabilidad. “La idea es que los vigilantes, cuyo turno natural comienza en la franja nocturna, puedan realizar una jornada ordinaria entre las 6:00 p.m. y las 9:00 p.m., y que a partir de ese momento se liquiden los recargos nocturnos. Si no se implementa esta propuesta, se verán afectadas aproximadamente 250.000 personas de manera directa”, explicó Díaz. Añadió que también serían golpeados sectores como los conjuntos residenciales, los bares, restaurantes y otros negocios abiertos al público en horario nocturno, cuya viabilidad económica podría verse comprometida.
Como parte de su estrategia para evitar que la reforma avance sin tomar en cuenta las particularidades del gremio, Confevip anunció que presentará su propuesta de régimen laboral especial en el marco del Octavo Congreso Internacional de Seguridad Privada, que se llevará a cabo en Montenegro, Quindío. En este evento, al que han sido invitados varios congresistas, se buscará socializar las inquietudes del sector antes de que la reforma sea debatida nuevamente en la plenaria del Senado.
Más allá de los impactos inmediatos, Díaz subrayó la importancia del gremio en la economía nacional. “El sector de vigilancia y seguridad privada genera cerca de 350.000 empleos directos y aporta alrededor de 10.5 billones de pesos anuales, representando el 1.2% del PIB, de acuerdo con cifras de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada”, afirmó. Además, añadió que el gremio es un referente en inclusión social, equidad de género, seguridad y salud en el trabajo y seguridad empresarial.
Con este pronunciamiento, el gremio espera incidir en el diseño final de la reforma laboral y evitar que las nuevas normas se conviertan en una barrera para la generación de empleo en uno de los sectores que más ha crecido en las últimas décadas. La solicitud de un régimen especial para el sector de vigilancia privada se configura como una alternativa técnica y viable que busca equilibrar las necesidades laborales con las condiciones operativas de una actividad esencial para el país.
Y.A.