Las autoridades ya manejan una hipótesis clave sobre el ataque armado que dejó tres muertos y nueve heridos la noche del pasado domingo en una finca ubicada sobre la vía al mar: el atentado estaría dirigido contra Raúl Henao Farías, conocido con el alias de ‘Choco’, presunto integrante de la estructura criminal ‘Los Costeños’.
Alias ‘Choco’ resultó herido en la balacera con un impacto en el fémur derecho. Según las investigaciones preliminares, el ataque habría sido ordenado por otro presunto miembro del grupo delincuencial, alias ‘El Turco’, con quien alias ‘Choco’ habría tenido disputas por el control de rentas ilegales.
El violento episodio ocurrió durante una fiesta electrónica en la finca Villa de Olvega, en el sector Mojito. Cuatro sicarios a bordo de dos motocicletas irrumpieron en el lugar y abrieron fuego de manera indiscriminada contra los asistentes.
Víctimas mortales identificadas:
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Luis Alfredo Vergara Julio (25 años): impactos en cuello y rostro.
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Ronald José Alarcón (19 años): impactos en la cabeza. Registraba una anotación por hurto.
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Maciel Karina Gómez (25 años): DJ y comunicadora social, falleció en la Clínica Portoazul.
Heridos, varios con antecedentes judiciales:
Entre los nueve lesionados se encuentran personas con antecedentes por delitos como estafa, tráfico de estupefacientes y concierto para delinquir. Uno de los casos que más llama la atención es el de Dayana Montaña Merlano, quien registra dos anotaciones judiciales y también resultó herida en el ataque.
Los demás heridos, entre ellos alias ‘Choco’, fueron trasladados a la Clínica Portoazul, donde continúan bajo atención médica.
Violencia ligada a estructuras criminales
El comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, general Edwin Urrego, confirmó que cuatro de los heridos tienen antecedentes judiciales, y no descartó que el hecho esté relacionado con disputas internas dentro de ‘Los Costeños’, estructura criminal que opera en la región Caribe.
La masacre ha generado una fuerte reacción en la comunidad y en autoridades locales, que ya trabajan en un plan de contención ante posibles retaliaciones.
