Senado aprueba en tercer debate la reforma laboral con 75 artículos

La Comisión Cuarta del Senado aprobó en bloque la mayoría del articulado de la reforma laboral, incluidos cambios clave en estabilidad, formalización, trabajo digital y condiciones para aprendices, médicos internos y personas con discapacidad.

En un importante avance legislativo para el gobierno del presidente Gustavo Petro, la reforma laboral fue aprobada en su tercer debate dentro de la Comisión Cuarta del Senado, consolidando un articulado de 75 artículos que plantea transformaciones estructurales en el mundo del trabajo en Colombia. Esta aprobación se logró tras intensos consensos, análisis de más de 100 proposiciones y la inclusión de 40 nuevos artículos que serán debatidos en la plenaria del Senado, en la última etapa legislativa.

El senador liberal John Jairo Roldán, vocero de la comisión, presentó una propuesta que permitió avanzar de forma sustancial: las proposiciones más polémicas quedaron como constancia para su debate posterior, evitando dilaciones innecesarias y facilitando la aprobación del grueso del texto. “Solicitamos que las proposiciones nuevas o de personas ausentes queden como constancia para discutirlas en la plenaria”, expresó Roldán.

A pesar de este procedimiento, cinco artículos considerados sensibles fueron debatidos y votados de forma individual: los artículos 6, 11, 15, 23 y 25.

Entre los puntos más relevantes está el artículo 6, que limita las prórrogas a contratos a término fijo, estableciendo un tope máximo de cinco años. Actualmente estas renovaciones no tienen límite, generando inestabilidad laboral. En la misma línea, el artículo 5 reafirma el contrato a término indefinido como regla general en las relaciones laborales.

Respecto a las jornadas de trabajo, el artículo 11 redefine los horarios de trabajo diurno y nocturno, fijando el diurno entre 6:00 a. m. y 7:00 p. m. y el nocturno a partir de esa hora. Asimismo, el artículo 12 introduce la posibilidad de pactar una jornada semanal de cuatro días, otorgando a los trabajadores tres días libres, una medida con alto impacto en la calidad de vida.

El recargo dominical y festivo también sufrió modificaciones con el artículo 15, que lo incrementa progresivamente hasta el 100%, reconociendo así el sacrificio del tiempo familiar en esos días.

En materia de formalización laboral, se destacan los artículos 36 al 39. Estos permiten cotizaciones por tiempo parcial, la mensualización de pagos prestacionales, incentivos a la contratación de jóvenes, mujeres y mayores de 50 años mediante el incentivo CREA, y la creación de la Unidad de Trabajo Especial (UTE) para trabajadores independientes con ingresos bajos.

Una de las transformaciones más aplaudidas es la mejora en las condiciones de los aprendices del SENA, con los artículos 23 y 25. La remuneración en etapa lectiva sube del 50% al 75% del salario mínimo y en etapa práctica llega al 100%. Además, tendrán afiliación a pensión, salud y ARL como trabajadores dependientes. Igualmente, el artículo 24 ordena el pago de un salario mínimo a los médicos internos, estudiantes de último año de medicina que hoy realizan prácticas sin remuneración.

La inclusión y equidad también ocupan un lugar protagónico. El artículo 9 establece la estabilidad laboral reforzada para personas con discapacidad, mujeres embarazadas, madres adoptantes y prepensionados. Por su parte, el artículo 16 impone cuotas mínimas de contratación para personas con discapacidad en empresas con más de 100 empleados.

Otros aspectos innovadores de esta reforma están orientados al trabajo digital. Entre los artículos 26 al 32 se regulan las condiciones laborales de trabajadores en plataformas digitales de reparto, garantizando derechos mínimos. Además, los artículos 56, 57 y 58 formalizan el teletrabajo, definiendo cinco modalidades, incluyendo el teletrabajo trasnacional y el híbrido, con un auxilio de conectividad de $200.000 para reemplazar el subsidio de transporte.

El artículo 17 también introduce una prima por crecimiento económico, que se podrá acordar en empresas que tengan un incremento superior al 4% en sus ingresos, incentivando una mejor distribución del crecimiento empresarial.

La reforma además establece una política pública contra la violencia y el acoso laboral con el artículo 20, e incluye disposiciones novedosas como el reconocimiento de las actividades productivas de personas privadas de la libertad como experiencia laboral válida (artículo 21).

Con esta aprobación, el gobierno logra un avance clave en su agenda social, aunque el verdadero reto será el cuarto debate en la plenaria del Senado, donde se revisarán los artículos más controversiales y se evaluará la viabilidad política de la implementación integral de esta ambiciosa reforma.

Y.A.