Por décima vez desde 2015, el Congreso de la República dejó sin aprobar un proyecto de ley que proponía reducir el salario de senadores y representantes. La iniciativa, impulsada por los congresistas Iván Cepeda y María José Pizarro, no logró avanzar en la plenaria del Senado debido a la falta de quórum.
Según los autores del proyecto, la ausencia de varios parlamentarios y una serie de impedimentos presentados durante la sesión impidieron que se llevara a cabo la votación. “Pese a que logramos que la iniciativa se discutiera como primer punto del orden del día, muchos senadores abandonaron el recinto, haciendo inviable su debate”, denunció Iván Cepeda.
Actualmente, los congresistas colombianos reciben un salario mensual cercano a los 52 millones de pesos, tras un aumento de 3 millones que se aplicó de forma retroactiva a partir de enero de este año. Para los autores del proyecto, esta cifra representa una desconexión profunda con la realidad del país.
La senadora María José Pizarro lamentó la falta de voluntad política del Congreso y señaló que se perdió “una oportunidad histórica para dar ejemplo en uno de los países más desiguales del mundo, donde millones de personas viven con menos de un millón de pesos al mes”.
Aunque el senador Jota Pe Hernández expresó su respaldo a la propuesta, también criticó que el Gobierno haya promovido el proyecto cuando el actual periodo legislativo está a punto de finalizar, lo que, en su opinión, reduce la efectividad y seriedad del mensaje.
El fallido intento se suma a una larga lista de iniciativas similares que, a lo largo de la última década, han fracasado en el Congreso. Esta persistente resistencia ha sido interpretada por algunos sectores como una muestra de la negativa de los legisladores a renunciar a sus privilegios económicos.