Por primera vez, el Gobierno contempló la posibilidad de no llevar a cabo la consulta popular que busca garantizar los derechos de los trabajadores del país.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, abrió esta puerta, señalando que sería un escenario factible si el Congreso de la República aprueba la revivida reforma laboral que ya avaló la Comisión Cuarta del Senado y que ahora tendrá su último examen en la Plenaria de la Corporación.
Sin embargo, el funcionario fue enfático al señalar que se trata de un escenario “poco probable”, dado que, según él, al Gobierno “le ha ido mal” en sus intentos anteriores con el Legislativo.
“En ese futuro hipotético, que es muy lejano, porque siempre nos ha ido mal con el Congreso de la República, allá han hundido todas las reformas sociales del Gobierno, lo que uno podría pensar es en no hacer la consulta. Pero ahora viene la etapa más difícil, que es la plenaria del Senado”, explicó Benedetti.
Esta postura contrasta con la del presidente Gustavo Petro, quien horas antes, durante el más reciente consejo de ministros, afirmó que el Gobierno continuará con el proceso de consulta popular, incluso si la reforma laboral es aprobada.