“¡Sin agua no hay atención!”: comunidad de El Carmen protesta frente a Aguas de Malambo por incumplimientos

La paciencia se agotó en la vereda El Carmen. Desde tempranas horas de este lunes, decenas de habitantes se plantaron a las afueras de las oficinas de Aguas de Malambo Grupo EPM, exigiendo lo que consideran un derecho básico: acceso legal y digno al servicio de agua potable.

Con pancartas, arengas y una protesta pacífica, la comunidad expresó su indignación por lo que consideran un incumplimiento flagrante de los acuerdos pactados hace poco más de un mes con la empresa prestadora del servicio. En dicha reunión participaron la alcaldesa Yenis Orozco Bonett y la Secretaría de Agua Potable del Atlántico, representada por Lady Ospina Corso. El compromiso era claro: conectar formalmente a los usuarios de la vereda El Carmen al sistema de agua.

“Queremos pagar, pero no nos dejan”

“Nosotros no estamos pidiendo agua gratis. Queremos pagar, queremos ser usuarios legales. Pero la empresa no ha querido cumplir con lo que prometió”, señaló con frustración una de las líderes comunales presentes en la protesta.

Según los manifestantes, Aguas de Malambo ha postergado reiteradamente la conexión del servicio, manteniendo a decenas de familias en condiciones precarias y, en muchos casos, dependiendo de tomas improvisadas o de agua transportada en tanques.

Sin solución, tampoco habrá atención

“¡Si no hay agua, tampoco hay atención al público!”, gritan los protestantes, quienes aseguran que no levantarán la manifestación hasta que obtengan una respuesta clara y una solución definitiva.

La comunidad recalca que está lista para cumplir con sus obligaciones como usuarios formales, pero que ha sido la empresa la que ha puesto trabas a la legalización del servicio.

Se esperan respuestas

Hasta el momento, la empresa Aguas de Malambo no ha emitido un comunicado oficial sobre la situación. Sin embargo, se espera que en las próximas horas se reanude el diálogo entre la comunidad, la administración municipal y la empresa para destrabar el conflicto y evitar una mayor escalada en las tensiones.

Mientras tanto, en El Carmen el mensaje es contundente: agua digna o protesta continua.