Presidente Gustavo Petro asistió a posesión de Daniel Noboa y solicitó diálogo regional y libertad para presos políticos

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, viajó este sábado a la capital ecuatoriana para participar en la ceremonia de posesión del presidente Daniel Noboa, convirtiéndose en uno de los pocos jefes de Estado de la región que acudieron al acto oficial.

La ceremonia se llevó a cabo en la sede de la Asamblea Nacional de Ecuador, y se espera que incluya una reunión bilateral entre los mandatarios de ambos países, en la que se abordarán temas de interés común. Este encuentro se da en un contexto de tensiones previas, luego de que Petro inicialmente expresara dudas sobre la transparencia de las elecciones que dieron como ganador a Noboa.

Antes de ingresar al evento, el jefe de Estado colombiano habló ante medios locales, reiterando su llamado a un diálogo nacional en Ecuador, Colombia y Venezuela, y calificando al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas como “preso político”. Glas fue capturado por la policía ecuatoriana dentro de la embajada de México en Quito, mientras esperaba una respuesta a su solicitud de asilo, lo que desató un conflicto diplomático.

Petro, a través de un extenso mensaje en sus redes sociales, explicó que su presencia en la posesión de Noboa busca promover una mayor integración regional, advertir sobre retrocesos democráticos en América Latina y reactivar el proyecto de la Gran Colombia bajo una fórmula de confederación de naciones.

“El vecindario de Colombia enfrenta serias amenazas a la democracia y crecientes tensiones internas. Es necesario avanzar hacia tratados comunes sobre ciudadanía, comercio, educación, soberanía energética y la creación de una moneda digital regional”, afirmó.

El mandatario también cuestionó el papel de actores internacionales en la región, denunciando la presencia de tropas extranjeras cerca del canal de Panamá y sugiriendo que algunos países latinoamericanos priorizan alianzas con potencias externas por encima de la unidad regional.

En su propuesta, Petro planteó una integración más profunda entre países como Colombia, Ecuador, Venezuela y Panamá, que incluiría la interconexión eléctrica, el impulso de energías limpias y una red académica compartida. Según dijo, estas acciones permitirían fortalecer las democracias en América Latina y avanzar en la superación de los conflictos internos.

Durante su intervención, también instó a los gobiernos de la región a liberar a los denominados presos políticos y garantizar elecciones libres como base para una verdadera soberanía.