El 80 % del departamento se encuentra en alerta roja por riesgo de deslizamientos de tierra, mientras crece la preocupación por las posibles crecientes súbitas de varios ríos. La Defensa Civil y el Ideam hacen un llamado urgente a la prevención.
El departamento de Risaralda atraviesa una crítica situación debido a la intensa temporada invernal que ha generado condiciones propicias para deslizamientos de tierra y crecientes súbitas de varios ríos. Según el más reciente boletín emitido por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), el 80 % de los municipios se encuentra en alerta roja, lo que ha encendido las alarmas de las autoridades locales y nacionales.
De los 14 municipios que conforman este departamento del Eje Cafetero, 12 están en alerta roja por riesgo de deslizamientos de tierra. Solo Dosquebradas y Marsella presentan alerta naranja, aunque no dejan de ser zonas vulnerables ante las precipitaciones que no cesan desde hace días.
El director de la Defensa Civil en Risaralda, Alfredo Muñoz, confirmó que los municipios con mayores afectaciones y riesgo inminente son Pereira, La Virginia y Santa Rosa de Cabal. “Por deslizamientos de tierra hay una alerta roja para los municipios de Apía, Balboa, Belén de Umbría, Guática, La Celia, La Virginia, Mistrató, Pereira, Pueblo Rico, Quinchía, Santa Rosa de Cabal y Santuario”, explicó Muñoz.
La situación se agrava con los riesgos asociados a los afluentes hídricos de la región. El Ideam advirtió sobre posibles crecientes súbitas en varios ríos. “Hay una alerta roja por posibles crecientes súbitas del río San Juan, con especial atención en los municipios de Pueblo Rico y Mistrató. Además, se mantiene una alerta naranja para el río Risaralda a su paso por Apía, Mistrató, Balboa y La Virginia”, detalló el director de la Defensa Civil.
También se ha emitido una alerta amarilla para el río Otún, con observación especial en las localidades de Santa Rosa de Cabal, Dosquebradas, Marsella y Pereira, lo que implica que la situación podría empeorar rápidamente si continúan las lluvias. En el caso del río Cauca, las autoridades mantienen un monitoreo permanente, en especial a su paso por La Virginia, donde el fin de semana pasado se registró un alarmante nivel de 5,74 metros, activando una alerta roja por posible desbordamiento.
La Defensa Civil y otras entidades del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres han desplegado operativos de vigilancia y han intensificado los patrullajes preventivos en zonas de alto riesgo. Asimismo, se han activado los comités municipales de emergencia para coordinar respuestas rápidas en caso de derrumbes o inundaciones.
Las autoridades hacen un llamado urgente a la comunidad para que se mantenga alerta ante cambios repentinos en los ríos y taludes, y reporten cualquier novedad a las líneas de emergencia. “Es fundamental que la ciudadanía colabore informando sobre signos tempranos de deslizamientos o aumento del caudal de los ríos. La prevención es nuestra mejor herramienta para salvar vidas en esta temporada invernal”, enfatizó Muñoz.
Este tipo de eventos son consecuencia directa de los efectos del cambio climático, que han intensificado los fenómenos de precipitación en esta zona montañosa del país. Además, la deforestación y ocupación de áreas inestables han incrementado la vulnerabilidad de muchas comunidades rurales.
La situación en Risaralda se suma a una serie de alertas emitidas por el Ideam en otras regiones del país que también enfrentan emergencias por lluvias, como el Valle del Cauca y Norte de Santander. En ese contexto, los organismos de socorro continúan haciendo un llamado conjunto a los entes territoriales para que refuercen sus planes de contingencia y garanticen la seguridad de sus habitantes.
Por ahora, las autoridades reiteran que las lluvias continuarán en los próximos días, por lo que el estado de alerta roja podría mantenerse o incluso extenderse a más zonas del departamento. Se recomienda evitar transitar por vías terciarias en zonas rurales, sobre todo en horarios nocturnos, y estar atentos a las señales de alerta emitidas por los organismos oficiales.
Y.A.