En medio de las celebraciones por la reciente elección del Papa León XIV, la organización SNAP (Red de Sobrevivientes de Abuso por Sacerdotes) ha lanzado una fuerte acusación contra el nuevo pontífice, señalando que durante su gestión como obispo de Chiclayo (Perú), habría encubierto casos de abuso sexual cometidos por miembros del clero.
La denuncia, hecha pública el mismo día de la primera aparición del Papa ante los fieles, sostiene que Robert Francis Prevost, cuando era provincial de los agustinos en Estados Unidos, permitió en el año 2000 que un sacerdote acusado de abusar de menores residiera en un convento cercano a una escuela primaria católica en Chicago, pese a que ya contaba con restricciones ministeriales desde 1991.
SNAP también alega que, ya como obispo en Perú, Prevost ignoró las denuncias presentadas en 2022 por al menos tres víctimas que, tras no obtener respuesta de la diócesis, acudieron a las autoridades civiles. Según la organización, no se abrió una investigación canónica adecuada, se enviaron reportes incompletos a Roma y el sacerdote señalado continuó oficiando misas, hecho que fue documentado con fotografías.
Estas denuncias se formalizaron el 25 de marzo de 2025, antes de la elección papal, bajo el amparo del decreto Vos estis lux mundi, promulgado por el papa Francisco, el cual establece lineamientos específicos para abordar abusos dentro de la Iglesia católica.
SNAP ha instado a León XIV a asumir una postura firme en sus primeros cien días de pontificado, proponiendo la creación de una Comisión Global de la Verdad con apoyo total del Vaticano, la implementación de una política de tolerancia cero universal en el derecho canónico, y el establecimiento de acuerdos legales internacionales que aseguren transparencia, reparación y rendición de cuentas.
Mientras tanto, la diócesis de Chiclayo ha rechazado las acusaciones, afirmando que los casos fueron tratados conforme a los protocolos eclesiásticos. No obstante, estas revelaciones han encendido el debate sobre el pasado del nuevo papa y el futuro de su liderazgo frente a uno de los temas más sensibles que enfrenta la Iglesia católica.