El gremio empresarial advierte que las presiones desde el Ejecutivo al Congreso comprometen el equilibrio institucional y hacen un llamado a respetar los límites democráticos y la independencia de poderes en el marco de la consulta popular.
En un contundente comunicado emitido este viernes, la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi) expresó su profunda preocupación por las recientes declaraciones del presidente Gustavo Petro en torno a la consulta popular propuesta por su Gobierno, en las que advirtió posibles amenazas de revocatoria al Congreso si este no aprueba la iniciativa.
El gremio empresarial consideró que estas manifestaciones representan una presión indebida que compromete el adecuado funcionamiento de la democracia y el respeto por la autonomía de las ramas del poder público. “Son inaceptables las amenazas de revocatoria emitidas desde la Presidencia de la República, dirigidas al Congreso, de hacer una revocatoria en caso de no aprobarse la consulta popular”, reza el comunicado difundido por la Andi.
Según la organización, este tipo de advertencias desde el Ejecutivo no solo tensionan la institucionalidad del país, sino que también vulneran uno de los pilares fundamentales del sistema democrático: la separación de poderes. La Andi subrayó que la Constitución Política de Colombia establece límites claros a todas las ramas del poder público, límites que deben ser especialmente respetados por quienes detentan mayores cuotas de autoridad.
“La Constitución y la democracia nos imponen límites a todos, especialmente a las personas con mayor poder y responsabilidad”, manifestó el gremio, en una frase que resume su llamado al respeto por la institucionalidad y la legalidad.
La declaración de la Andi se produce en medio de un creciente clima de polarización política por el intento del Gobierno de someter a consulta popular algunas de sus reformas estructurales, posiblemente incluyendo aspectos relacionados con el sistema de salud, pensiones y justicia. La iniciativa ha generado resistencia no solo en algunos sectores del Congreso, sino también en gremios empresariales y analistas políticos, quienes temen que se trate de un mecanismo para sortear los contrapesos institucionales previstos en la democracia representativa.
En su comunicado, la Andi enfatizó que “la democracia tiene como condición necesaria que todos sus actores puedan actuar con libertad e independencia, sin presiones indebidas, ni provenientes de otras ramas del poder público, ni de fuerzas arbitrarias”. Esta afirmación busca reforzar la necesidad de preservar la independencia de cada una de las instituciones del Estado para garantizar el funcionamiento equilibrado del sistema político.
Además, el gremio reiteró que el papel del Ejecutivo no puede consistir en coaccionar al Legislativo, sino en promover el diálogo constructivo y el consenso, especialmente cuando se trata de reformas que impactan a toda la ciudadanía.
Frente a este panorama, la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia instó a que el país se enfoque en fortalecer los principios democráticos y no en debilitarlos con discursos que podrían interpretarse como autoritarios. “Colombia debe luchar por tener y garantizar una democracia libre y plena, en la cual el Estado debe ser el principal garante de su funcionamiento y operatividad”, concluyó el gremio.
El pronunciamiento de la Andi se convierte así en una de las voces más influyentes que se suma al debate nacional sobre los límites del poder presidencial y el uso de mecanismos de participación popular como herramienta de presión política. Aunque el presidente Petro no ha formalizado aún el contenido específico de la consulta, sus declaraciones han generado interpretaciones que han encendido las alarmas en diversos sectores sobre una posible confrontación institucional.
En un país donde la estabilidad democrática ha sido fruto de esfuerzos constantes por garantizar el respeto a la separación de poderes, la tensión entre el Gobierno y el Congreso por esta consulta podría marcar un punto de inflexión en la relación entre las instituciones. La advertencia de la Andi, lejos de ser un simple llamado gremial, plantea un cuestionamiento directo sobre los métodos utilizados por el Gobierno para lograr la aprobación de sus iniciativas y sobre los riesgos que esto podría representar para la institucionalidad democrática.
Y.A.