Expertos y empresarios advierten que la propuesta del Gobierno podría replicar los errores de la reforma laboral impulsada por Hugo Chávez en Venezuela en 2012.
La propuesta de reforma laboral del presidente Gustavo Petro ha generado una fuerte polémica en sectores económicos y políticos del país, al ser comparada con la ley laboral implementada por el expresidente venezolano Hugo Chávez en 2012, la cual es señalada como el detonante de una grave crisis económica en el vecino país.
La reforma presentada por el Gobierno busca fortalecer los derechos laborales, garantizando estabilidad, prohibiendo despidos sin justa causa, aumentando las licencias y elevando las cargas prestacionales para los empleadores. Sin embargo, críticos advierten que esta visión podría tener consecuencias contraproducentes para el empleo y la economía nacional.
«Esta propuesta es casi una réplica de la Ley Orgánica del Trabajo que impulsó Hugo Chávez en Venezuela,» afirman voceros del sector empresarial. La normativa venezolana redujo la jornada laboral, amplió los beneficios laborales y prohibió despidos, lo que, según datos independientes, provocó un aumento del desempleo del 7,8% al 27% entre 2012 y 2017, un crecimiento de la informalidad laboral al 65% y la quiebra de más del 70% de las pequeñas y medianas empresas.
Los críticos advierten que Colombia podría vivir un escenario similar si se implementan reformas que elevan los costos laborales sin mejorar la productividad o facilitar la creación de empresas. «El populismo laboral destruye más empleo del que promete proteger,» señalan analistas, quienes sugieren enfocar los esfuerzos en reducir la burocracia, promover el emprendimiento y fomentar la inversión.
Desde el Gobierno, sin embargo, se defiende la propuesta como una medida de justicia social. El presidente Petro ha insistido en que se trata de garantizar trabajos dignos y condiciones laborales humanas, rechazando las críticas como «temores infundados del modelo neoliberal».
El debate sigue abierto y será el Congreso quien tenga la última palabra sobre una reforma que podría marcar el rumbo laboral y económico del país en los próximos años.