Una conmemoración simbólica: es una trinchera de lucha. Es la memoria viva de los que cayeron peleando por jornadas dignas y salarios justos, y es también el grito de los que aún hoy sufren la precariedad, la informalidad y la humillación del trabajo sin derechos.
Acompañaremos a todas y todos los trabajadores de Colombia a tomarse las calles este Primero de Mayo. No vamos a quedarnos callados mientras las élites hunden la Reforma Laboral, desprecian los derechos del pueblo y perpetúan un modelo de país hecho a su medida, no de las mayorías.
¡Basta ya de contratos basura, de tercerización criminal, de sueldos de hambre! Mientras millones sudan para sobrevivir, los grandes empresarios y sus partidos aliados en el Congreso reparten privilegios, exenciones y subsidios multimillonarios. Nos dicen que no hay plata, pero se han robado hasta el futuro de nuestros hijos. ¡Más de 44 millones por trabajador fueron transferidos a los ricos! ¡Y al pueblo, migajas!
La injusticia laboral es solo una parte del desastre. A las regiones nos han negado
siempre: sin hospitales, sin tierra, sin oportunidades. El campo colombiano sigue en manos de unos pocos latifundistas, la reforma agraria sigue siendo promesa
frustrada y las mujeres y juventudes cargan con el peso de una cultura patriarcal,
excluyente.
Desde Fuerza Ciudadana no aceptamos este país diseñado para unos pocos. Respaldamos con fuerza la organización sindical, la Reforma Laboral que el Gobierno ha impulsado, y la Consulta Popular como camino legítimo para conquistar lo que
nos han negado desde arriba. ¡El poder popular se construye desde abajo, con las
manos del pueblo trabajador!
Convocamos al pueblo entero: a los campesinos, a las maestras, a los mototaxistas, a las juventudes con un futuro incierto, a las mujeres trabajadoras, a los obreros, a los barrios populares. ¡Este 1º de mayo levantemos nuestras voces, nuestras
banderas y nuestros sueños!
¡No más silencio! ¡No más explotación! ¡Este país cambiará desde el trabajo,
desde el territorio, desde el poder del pueblo organizado!
¡Hasta la victoria!
