ELN entrega pruebas de supervivencia de los dos soldados profesionales Julián Reinel Sáenz y Yilmer Andrés Coral Gómez secuestrados en Cúcuta el pasado 9 de abril. pic.twitter.com/vHIKTzycDl
— Olga Lucía Cotamo (@OlgaLucaCotamo) April 25, 2025
Los uniformados Julián Reinel Sáenz y Yimer Andrés Coral Gómez confirmaron en un video que han recibido buen trato. La Defensoría del Pueblo, la Iglesia y la ONU alistan su liberación, pero aún no hay fecha definida.
En un nuevo capítulo del prolongado conflicto armado colombiano, el ELN difundió un video que constituye prueba de vida de los soldados secuestrados en el casco urbano de Cúcuta el pasado 9 de abril. Los uniformados Julián Reinel Sáenz y Yimer Andrés Coral Gómez, miembros del Gaula Militar de la Brigada Treinta del Ejército Nacional, aparecen en las imágenes asegurando que han recibido buen trato durante su cautiverio.
La grabación, realizada el domingo 20 de abril y entregada por la guerrilla del ELN, muestra a Sáenz afirmando: “Fui capturado el 9 de abril por el ELN, a la fecha de hoy 20 de abril he recibido buen trato. Pertenezco al grupo orgánico del Gaula Militar de la Brigada Treinta del Ejército”. Por su parte, Coral Gómez expresó: “Tengo 28 años de edad, fui capturado por integrantes del ELN el pasado 9 de abril. Yo pertenezco al Gaula Militar, hasta la fecha 20 de abril me han tratado bien, me han respetado mi integridad física como psicológica”.
El video ha generado reacciones inmediatas por parte de organismos humanitarios y del Gobierno nacional. Al día siguiente, el 21 de abril, se conoció que la Defensoría del Pueblo, la Alta Consejería para la Paz, la Iglesia Católica y la ONU se encontraban en fase de preparación para una eventual entrega humanitaria de los dos militares. Sin embargo, pese al aparente acercamiento, han pasado cinco días sin que se haya confirmado la fecha de la liberación.

Los dos soldados fueron secuestrados mientras realizaban labores de vigilancia y seguimiento tras denuncias de la comunidad sobre presuntos casos de extorsión perpetrados por esta guerrilla contra comerciantes de la región. Las acciones se enmarcaban dentro de los operativos de control territorial del Ejército en una zona históricamente marcada por la presencia de grupos armados ilegales.
Según confirmó Luis Fernando Niño, Alto Consejero para la Paz en Norte de Santander, en declaraciones un medio de comunicación nacional, las autoridades están “a la espera de conocer las coordenadas donde se estarían dejando en libertad a estos militares”. Añadió además que se mantienen en constante comunicación con las entidades internacionales que acompañan el proceso.
Por su parte, se conoció que el ELN estaría solicitando un cese de operaciones militares por 72 horas en Tibú, como condición para concretar la liberación de los soldados. Esta petición se encuentra actualmente en evaluación por parte del Gobierno y las Fuerzas Militares, en un contexto en el que se busca avanzar en la implementación de acuerdos de paz parciales con ese grupo insurgente.
Este nuevo episodio se suma al complejo panorama de seguridad en la región del Catatumbo, donde aún persiste la Conmoción Interior decretada a raíz de la intensificación del accionar de grupos armados ilegales. La posible liberación de los soldados representa no solo un avance humanitario, sino también un desafío logístico y político, en medio de un proceso de paz en curso con múltiples tensiones y retrocesos.
Las autoridades reiteran su llamado al respeto del Derecho Internacional Humanitario y exhortan al ELN a facilitar la entrega inmediata y sin condiciones de los uniformados. Al mismo tiempo, se mantienen alertas en el departamento de Norte de Santander, dada la persistencia de amenazas contra la población civil y los riesgos derivados de nuevas confrontaciones armadas.
El país permanece en vilo, a la espera de que este gesto humanitario anunciado se concrete en hechos. Mientras tanto, las familias de Julián Reinel Sáenz y Yimer Andrés Coral Gómez aguardan con angustia el regreso de sus seres queridos, aferrándose a las imágenes divulgadas como única garantía de vida en medio de la incertidumbre.
Y.A.